Dos solteros no consiguen ponerse de acuerdo con el tema de los hijos: ''Para mí es una red flag''

Artem ha acudido a 'First Dates' en busca del amor. Es un joven ruso de 27 años al que le encanta la geografía, la historia y viajar. Nuestro soltero sorprendía a Laura, la camarera del programa, al afirmar que conocía ''todas las capitales del mundo''.

Tras escuchar sus palabras, Laura le ponía a prueba al preguntarle por tres capitales y él las acertaba todas: ''Es un crack'', afirmaba Laura a la vez que le chocaba los cinco para celebrar su don.

Nuestro soltero busca una chica para tener una relación seria y tener hijos, algo muy importante para él. A su cita, Laura, una joven de 22 años con familia ucraniana, le chocaba que Artem fuese ruso: ''Ha sido un choque casual. A ver si se va a ir corriendo porque yo conozco a mucha gente rusa que me ha dejado de hablar por el conflicto'', confesaba.

Ya sentados en la mesa, los solteros se abrían y Artem le preguntaba por sus tatuajes a Laura y ella le explicaba detalladamente los significados de todos ellos. Laura le confesaba a su cita su deseo de ser maestra y Artem quedaba encantado: ''Está muy bien, se supone que le gustan los niños''.

Tras esto, Artem se lanzaba a la piscina: ''Dentro de dos, tres o cuatro años, estaría bien tener hijos, como mucho dos'', pero Laura no se mostraba interesada: ''Yo depende, si estoy en una relación estable me lo pensaría. Soy partidaria de vivir mi vida porque todas mis amigas que tienen hijos me han dicho que mejor que no, que pierdes todo''.

''Para mí ha sido un poco red flag porque no quiero tener hijos para nada'', confesaba Laura a las cámaras del programa y revelaba que Artem era ''demasiado serio''.

Pese a que al principio ambos no conseguían hacer match, los dos intentaban conocerse más y poco a poco la cita mejoraba y se sinceraban sobre su pasado y tocaban el tema de la guerra y Artem se mostraba muy abierto: ''Está bien que su madre sea ucraniana, me va a entender, podemos hablar el mismo idioma y es un punto más''.

Además, ambos coincidían en ''un sueño frustrado'', saltar en paracaídas, y descubrían que los dos son amantes del deporte, algo que los unía un poquito más: ''Normalmente la gente piensa que por ser uno de Rusia y otra de Ucrania nos vamos a llevar mal por el tema de la guerra y no'', explicaba Laura.

Laura y Artem, aunque al principio no habían congeniado mucho, después se conocían poco a poco y conseguían tener mucho en común. Ya en la decisión final, Artem respondía a si quería tener una segunda cita: ''Sí, tendría una segunda cita porque ha sido muy interesante hablar con ella. Sería muy interesante seguir hablando y conocerla''.

Laura coincidía con él: ''Podríamos conocernos más, tomar un café. Es un buen ejemplo para demostrar que aunque nuestros países natales estén en guerra podemos conocernos, no tenemos por qué llevarnos mal. No creo que cuestiones políticas tengan que ver con una relación''.