Un soltero olvida a Laura Boado al ver a su cita en ‘First Dates’: “Nos vamos a Cuba”
Descubre cómo Pedro pasa de decir que su prototipo es Laura a quedarse prendado de su cita
Alejandra se asusta ante las red flags de su cita en ‘First Dates’: “Yo no soy puntual”
Una soltera corta el rollo a su cita: “Tía sosa, no me extraña que esté sola”
Con una pelota en los pies, Pedro es el tipo más feliz del mundo. Jugó en primera división en Inglaterra, pero se retiró por varias lesiones y ahora es solo una afición. En el amor ha tenido tres parejas, pero no salió bien la cosa y por eso está en ‘First Dates’. Le gustaría encontrar el amor y formar una familia. A su cita le pide solo que sea buenas personas y si tiene que elegir un prototipo de mujer, se queda con Laura Boado. Le gusta su belleza y su timidez.
Laura Boado bromea con Pedro al saber que es su prototipo de mujer
MÁS
Alejandra, su cita, tiene la sensación de que da una sensación equivocada al principio “cambio la mirada, estoy un poco empanada y parece que soy un poco borde”. Al verla, Pedro ha sentido que era una chica muy mona y se ha dejado llevar. La soltera ha querido saber cuántos años tenía y si estaba un poco nervioso como ella. Los dos son de Madrid, pero la familia de Alejandra es cubana y ella todavía no ha visitado el país.
La cena ha comenzado hablando de trabajo y Pedro le ha dicho que trabajaba en una administración de lotería y que su gran pasión era el fútbol. A Alejandra no le importaría jugar al fútbol, pero lo de verlo juntos no sabe si lo soportaría. El soltero le ha contado su experiencia como profesional en Inglaterra y Paraguay, y le ha hablado de algunos lugares a los que había viajado, algo con lo que su cita ha alucinado “el Polo Norte en crucero, fui con mis abuelos”.
Alejandra, a Pedro: “¿Perdonarías una infidelidad?”
La soltera ha querido saber cuáles eran las red flags de su cita y ha flipado al saber que Pedro odia la impuntualidad y las mentiras porque ella no suele llegar nunca en hora. También ha querido saber si su cita perdonaría una infidelidad y le ha dejado claro que ella sí. Pedro no sabía muy bien cuál era su respuesta, pero le ha dicho que para él es muy importante la honestidad y la sinceridad en la pareja.
En el reservado, les ha tocado darse un beso loco y ella le ha dicho que no había nada más loco que un beso en la frente, pero Pedro se ha negado a darle un beso de abuela y han terminado con un beso en la nariz. Los dos han estado muy cómodos en la cita, se lo han dicho y han querido darse la oportunidad de conocerse mucho mejor.