Natalia se ha presentado en ‘First Dates’ como una joven con el músculo de la lengua muy desarrollado y no ha dudado en hacernos una demostración de todas sus habilidades con la lengua. Ha venido con un abrigo muy pesado y unos zapatos muy pesados, y le ha explicado a Carlos Sobera que tenía una estética kawaii. Le gusta mucho la cultura asiática y los chicos muy habladores, con mucha conversación y dicharacheros.
Samir, su cita, nació en España, pero es de origen bereber y ha dejado a Carlos Sobera impresionado con su espectacular y larguísima coleta. Él mismo se hace la trenza cada mañana y asegura que su pelo es un anzuelo para las chicas “ellas se acercan y yo me las ligo”. A Natalia le ha parecido que su cita era un tipo Tarzán “cada uno a su rollo” y él ha sentido que estaba “buenísima”.
Han roto el hielo hablando de Málaga y de su gusto por el K-Pop y el manga, pero Natalia ha sentido que Samir no tenía la chispa que buscaba. Carlos Sobera se ha fijado en lo recta que estaba la soltera y ella le ha explicado el motivo “mi madre siempre me ha dicho que recta, chepa, no”.
La cena ha comenzado hablando de lo que hacía Samir en su día a día. El soltero tiene una cita de bikinis frente al mar y en sus ratos libres va al gimnasio. Natalia ha querido saber si era su tipo de chica y él le ha dicho que sí “me gustan las chicas con las tetas gordas”. A Samir le gustaría tener una relación seria, convivir y casarse en un corto plazo de tiempo, una idea que ha Natalia le ha sorprendido porque no está en sus planes y lo de tener hijos, tampoco.
Natalia le ha explicado a Samir que le gustaba vestir con outfit muy locos y que bailaba twerking, detalles que al soltero le han echado para atrás “la veo demasiado abierta, yo necesito a alguien más tradicional”. La soltera ha querido saber si su cita tenía algún talento y al saber que no, le ha demostrado todo lo que ella sabía hacer con la lengua. Samir no daba crédito “esta chica tiene dos neuronas”.
Jugando al Rasca del Amor, les ha tocado contar qué personaje de ficción serian y Samir ha alucinado al comprobar que Natalia no sabía quién era Sylvester Stallone, que quería ser la Barbie y que no tenía ni idea de que era la época victoriana. Ella se ve más en la época de los dinosaurios o en el futuro, y ha alucinado al saber que su cita estaba leyendo a Marco Aurelio. Samir no daba crédito y le ha traicionado el subconsciente “Lo que más me gusta de Natalia son sus tetas”.
Samir no es mucho de salir de fiesta, pero sí se pega una fiesta de vez en cuando “para descargar testosterona”. Aprovecha sus noches locas para conocer chicas, pero Natalia ha sentido que no era un chico muy marchoso. Cuando ha sonado la música, Natalia se ha puesto a bailar twerking y ha confirmado la teoría de Samir “Natalia no es para tener una relación, es alguien con quién echar cuatro polvos”.
En el momento de la decisión genial, a Samir no le ha gustado que le dijera que era maja “eso es mediocre”, pero le ha dicho que sí tendría una segunda cita con ella porque “es atractiva y sabe estar”. Sin embargo, Natalia ha sido sincera y le ha dicho que no quería repetir.