Alejandro es un gran fan de Rosalía y es una pasión que comparte con su madre. Estudia periodismo y adora el mundo del corazón y la tele. Se siente pijo y le ha molestado que le dijeran que traía un jersey que parecía que la había arañado un gato “me ha sentado mal, la verdad”. Es muy nervioso y necesita a una persona tranquila a su lado “solo permito que me dominen en la cama, mi vida la domino yo”.
Ama a Rosalía más que a su madre, pero también le gusta Chanel y ha querido recibir a su cita con una coreografía. Adrián, su cita, es influencer, cantante y estudia de Geografía e Historia “me he hecho famoso en redes porque tengo el pelo como el jugador del Chelsea, Cucurella”.
Al entrar en ‘First Dates’ ha alucinado al ver a su cita dándolo todo al ritmo de Chanel, pero no ha sido el único. Alejandro no se esperaba de ningún modo que su cita fuera Cucurella de TikTok. Han comenzado a conocerse hablando de sus redes sociales y de sus estudios, y Adrián ha pasado el primer filtro al confesarle que también le gustaba Rosalía.
Ya sentados en la mesa, Alejandro ha bromeado con que estaba haciendo la dieta de los treinta días y que había perdido “treinta días”, pero Adrián no ha pillado el chiste y eso a él, le ha hecho desconfiar. El soltero ha querido saber cómo se veía en un futuro su cita y ha tenido caro que Adrián no era para él porque no pegaba nada un profesor de geografía con un periodista “me pega más un actor, un cantante, un torero…”.
Alejandro ha querido saber si a Adrián le gustaba más Rosalía o Chanel y ha alucinado porque el malagueño se ha quedado con Chanel y con su querida Ana Mena. Los dos son mucho de reírse de la gente y Alejandro ha sentido que eran demasiado iguales para tener nada “lo único que puedo hacer es peinarle”.
El soltero ha tenido curiosidad de saber si Adrián se habían alisado el pelo alguna vez y al saber que solo el flequillo, ha sentido que le quedaría muy bien la cabeza rapada, pero por su actividad en redes sociales no puede cortárselo “es lo que me identifica”.
Adrián ha cogido el micrófono para cantarnos su famosísimo “Cucurella” y a Alejandro le han entrado los celos porque no le gusta que llamen la atención más que él. Le ha dicho que le había encantado su actuación, pero en realidad ha sentido que no cantaba bien “yo le daría un Grammy”. En el momento de la decisión final, Adrián ha dicho que sí a una segunda cita, pero Alejandro le ha explicado que eran demasiado iguales para poder tener algo más que una amistad “somos los dos géminis, que no es tontería”.