Nerea oculta a su cita en ‘First Dates’ que es una chica tóxica: “Hay cosas que no se pueden contar el primer día”

  • Nerea saca una red flag al saber que su cita lleva tatuada la palabra “narcisista”

  • Álex, a su cita: “¿Has pensado que era gay al verme?”

Álex es un tipo hambriento de vida y de experiencias, de conocer gente nueva y de vivir este camino de subidas y bajadas que es la vida. Es profesor de pádel y quiere estudiar el curso de auxiliar de vuelo. Es muy intenso en el amor y cuando está enamorado oculta el resto de las emociones. Busca a una persona con muchas ambiciones y muchas ganas de vivir, y se lo ha contado con tanta intensidad a Carlos Sobera que el presentador le ha soltado un “me estoy estresando”. 

Nerea, su cita, es una chica “un poco tóxica” y no duda en reconocerlo. Al verla, la cara de Álex ha dejado claro que le había entrado por los ojos y ella también ha visto a un tipo que le gustaba. La soltera le ha contado que era azafata de vuelo y Álex ha flipado porque ese era su sueño “pìnta demasiado bien, he visto mi futuro”.

Los jóvenes han comenzado la cena hablando de sus gustos culinarios y Nerea está convencida de que a Álex no le gusta el sushi porque no ha probado el adecuado. Hablando de relaciones, ella le ha contado que había tenido dos cortitas y no le ha sorprendido que él no hubiera congeniado con nadie. Ambos han descubierto que son igual de intensos en el amor y que buscan un amor para toda la vida.

Álex ha querido saber si Nerea era celosa y ella le ha dicho que sí, pero se lo ha dicho de forma muy suave porque tiene claro que no se puede decir de primeras que es tóxica “eso hay que irlo sacando poco a poco”. A él no le ha hecho mucha gracia porque él liga mucho y él no tiene la culpa de gustar.

Él se ha remangado la manga para mostrarle un tatuaje que decía “narcisista” y le ha explicado que le gustaba mucho hablar de sus cosas buenas y que por eso le llamaban así. Un pequeño detalle que ha asustado a Nerea “es un poco red flag”, pero que se podía superar.

En el reservado, los solteros se han puesto a bailar y Álex ha hecho gala de su mote de narcisista porque quería que Nerea le dijera lo guapo que estaba, pero ella no ha entrado al juego. También le ha enseñado un tatuaje de una mariposa y ha querido saber si al verle había pensado que era gay, pero ella le ha dicho que cuando conoce a alguien intenta dejar la mente en blanco y no sacar conclusiones anticipadas.

Ambos han estado cómodos juntos y aunque ella le ha advertido que había visto alguna que otra red flag que habría que pulir, se han dado un “sí” a una segunda cita