Jesús deja fascinada a su cita de ‘First Dates’ con su modo de vida en permacultura: “Gastas poco dinero”
María corta por lo sano a Jesús en el reservado de ‘First Dates’: “Me gusta hablar contigo, pero no me atraes”
Jesús siente curiosidad al saber que María tiene pareja: “Sería una forma de experimentar algo nuevo”
Jesús busca a una chica disruptiva que se sume a sus planes locos y poco convencionales. Lleva una vida nómada y basada en principios de cooperación y respeto a la naturaleza “más que una comuna hippie”. Y en el amor, le podría encajar una relación muy abierta y flexible que se adapte a su forma de ver la vida.
María, su cita, tiene una pareja desde hace unos tres años, pero es una pareja completamente abierta “es mi compañero de vida” y busca a una persona que pueda complementar su relación. Al verla, Jesús ha visto a una chica estilizada y que se cuidaba, algo muy importante para él.
La soltera ha comenzado la cita preguntándole a Jesús a qué se dedicaba y él le ha dicho que había sido informático, pero que ahora se dedicaba a la permacultura “agricultura ecológica, bioconstrucción, gestión de comunidades…”. Algo que a ella le ha resultado muy interesante.
Los solteros han comenzado la cena hablando de sus respectivas alimentaciones y de que ella dejaría de ser vegetariana si hubiera animales felices. En ese aspecto, Jesús le ha contado un poco en qué consistía su modo de vida, que estaba de voluntario en una comunidad y cómo el ser humano huye de ser autosuficiente. María le ha escuchado con mucha atención, pero ha sentido que ella es más de vivir independiente y ser autosuficiente, que de compartir en comunidad.
Ella tiene dos perros que le limitan mucho viajar y Jesús ha querido saber si sus perros y ella mordían, pero se ha encontrado con un “depende”.
Jesús ha querido saber qué concepto tenía del amor María y ella le ha contado que tenía ya a su compañero de vida, un amor indestructible y que, a partir de ahí, todo lo que fuera surgiendo era bienvenido. A él le ha encantado porque él también apuesta por le amor libre y le han entrado muchas ganas de experimentar porque él nunca había estado con alguien que ya tuviera pareja, y sería una forma de aprender otros conceptos.
En el reservado, les ha tocado darse besos y algún que otro mordisquito, pero antes de que la cosa fuera a más, ella ha querido ser sincera y le ha dicho que le gustaba hablar con él, pero que físicamente no había sentido ninguna atracción “entonces, los besos, complicado”.
María ha sentido que igual estaba siendo demasiado sincera con Jesús, pero a él le ha parecido bien que fuera sincera y ha entendido que no puedes gustarle físicamente a todo el mundo, pero que en plan amigos si podían seguir aportándose conocimientos.