Eli se ha presentado en ‘First Dates’ como una mujer que se fija mucho en los pequeños detalles y que es un poco koala. Su tía encontró el amor en nuestro restaurante hace tres años y sigue muy enamorada de su cita. Ella tuvo una relación seria con el padre de su hija, pero ya lleva unos añitos soltera y busca a alguien que se apunte a cualquier plan que surja.
Felipe, su cita, es educador y siente que es un trabajo complicado, pero que siempre te da algo. No para quieto y si no está tomando algo con sus amigos, está jugando al fútbol. Nada más verse, los dos han sonreído y la cita ha comenzado con mucha energía positiva. A Eli le ha gustado mucho Felipe y él se ha fijado sobre todo en su sonrisa.
La cena ha comenzado hablando de niños y Elis le ha contado que ella era madre de una niña de ocho años. Él se conforma con los chavales a los que educa, pero le ha hablado de su relación más larga, una relación que ha definido como tóxica “de hecho, cuando hablamos sigue existiendo tensión”. A Elis le ha asustado un poco porque ella no quiere a nadie que le diga lo que tiene que hacer, pero él le ha dicho que era muy crío y que siente que ha cambiado.
Los solteros han coincidido en el tema de viajar y en que ambos son “un culo inquieto”, disfrutan mucho de los conciertos... A Eli le daba un poco de apuro contárselo, pero le ha confesado que se apuntó a un concurso para cantar ‘Marinero de luces’ y que terminó rapeando en una pelea de gallos “fue una locura, con réplica y todo”, pero que se lo pasó fenomenal.
Entre ellos ha surgido una conexión y un feeling muy guay, y no han dudado en decirse lo que más les había gustado y lo guapos que estaban los dos de negro. A ella le ha gustado la mirada de Felipe y él se ha quedado fascinado con su sonrisa. Los dos están dispuestos a viajar entre Sevilla y Cádiz por amor, y se han dado un sí a una segunda cita.