Eros acaba con la autoestima de su cita en ‘First Dates’: “Me he sentido un poco engañado”
Eros hace creer a Manuel que le gusta durante toda la cita y luego le rechaza: “No cumples mis expectativas”
Manuel, indignado con la actuación de Eros: “Vete a buscar a uno al gimnasio”
Manuel ha llegado a ‘First Dates’ con la autoestima bajita y la sensación de que no le gusta a nadie. Está jubilado y le gusta mucho salir a comer. De joven ligaba muchísimo, pero en los últimos años ha tenido mala suerte en el amor “se han aprovechado de mí” y está buscando a una persona que le quiera y le ayude a subir su autoestima.
Eros, su cita, se ha definido como un tipo “jovial, inteligente e interesante”. Según le ha contado a Laura Boado, es florista y le encanta su trabajo. Al verle, Manuel ha visto a un tipo atractivo, pero le ha dado miedo que le rechazara por ser mucho más bajito que él.
La cena de Eros y Manuel ha comenzado hablando de edades y físicos. A Eros le gustan los tipos “hermosos, altos, fibrados…”, pero ha sentido que Manuel era un tipo agradable, que no estaba gordo y que “con algún que otro retoque…”.
Manuel le ha contado que había sido pintor de brocha gorda, camarero y cuidador de personas mayores, algo que Eros ha visto como un problema porque él todavía estaba en activo y tenía una vida más intensa. Además, también ha descubierto que a Manuel no le gustaba la noche y a él sí le gustaba salir.
Eros no paraba de encontrar contras para tener una relación con Manuel, pero él solo veía a una persona sincera, educada y amable con él. En el reservado, Eros seguía muy preocupado porque el físico de su cita no le gustaba, pero no ha parado de coquetear con él y ha llegado a besarle en varias ocasiones. Eso sí, también ha sentido que no le había gustado “lo he visto muy frío”.
Los solteros se han vuelto a besar y Manuel estaba feliz, pero Eros ha confirmado que no estaba sintiendo nada y que no quería seguirle conociendo. Al saber que Eros no quería repetir la cita con él, Manuel ha querido saber el motivo y él no ha dudado en decirle que no le gustaba su físico y que buscaba a alguien más alto y más fibrado.
Manuel estaba flipando “vete a buscar a uno a un gimnasio”. No podía creer que le estuviera dando calabazas “nos hemos besado y te ha gustado, yo lo he notado”. Eros ha intentado explicárselo como mejor ha podido, pero Manuel no podía evitar sentirse engañado.