Asier ha entrado en ‘First Dates’ subido en su monociclo y nos ha contado que siente que las personas cuando se mueren se convierten en algún animal. Está opositando para Policía Nacional, pero se define como un poco antisistema. Nunca se ha enamorado, pero tiene la ilusión de encontrar a una mujer que sea para toda la vida “una relación de fantasía”.
Lorena, su cita, nos ha contado que en su pueblo “hay mucho puterío” y al ver a Asier ha visto a un chico “alto y fuerte, me gusta”. Han comenzado hablando de sus lugares de residencia y a Asier no le ha gustado mucho que Lorena fuera a dejar el Bachillerato y que tuviera una granja “yo cuando voy a un pueblo voy a descansar”.
La cena ha comenzado hablando de animales y Asier ha tenido claro que él ya tenía bastante con su deporte como para “ponerme a ordeñar vacas” y se ha quedado igual al saber que Lorena tenía “un pato mudo”. Ella le ha contado que era de vida tranquila y que no salía. Es más, de ver películas, algo que él ve como una perdida de tiempo.
A ella le ha alegrado mucho que él quisiera ser policía porque a ella le hubiera gustado pertenecer a la unidad canina, pero lo del deporte no es lo suyo “prefiero quedarme en el sofá”.
Asier se ha sorprendido al saber que su cita solo había viajado a Murcia y que no volvería porque estaba nublado. Ella es mucho de animales y le ha contado que se había encontrado un sapo y que le había hecho mucha ilusión “perdí el autobús, me subí a otro, me perdí y me encontré un sapo”. Anécdota que Asier ha visto como una señal de buena suerte “pierdes una cosa y encuentras otra”.
Lorena no podía dejar de mirar a su cita, estaba prendada de su belleza y ha querido saber qué le había traído a ‘First Dates’. Asier le ha contado que quería conocer al amor de su vida y le ha gustado muchísimo más. Lo que ella no esperaba es que él le diera calabazas porque ha sentido que tenía muy pocas aspiraciones en la vida.