Amaia es auxiliar de enfermería y le apasiona el mundo de la moda, tanto que nos ha contado hasta cómo es su vestidor. Cuando se mira al espejo le gusta lo que ve “lo que más me gusta es mi culo” y asegura que no le faltan pretendientes, pero que es un poco rarita y rápido les pone la cruz.
José Ángel, su cita, se define como una persona muy analítica, pero también como un punto desenfadado. Al verle, Amaia ha sentido que los chicos con pelo largo y barba no le entraban por el ojo, pero ha sido solo una primera impresión. Él sí ha visto a una chica que le atraía y la cita ha comenzado con risas porque se ha confundido y ha llamado Martín, a Matías “Tengo cara de Martín, no te preocupes”.
Los solteros han comenzado la cena hablando de comida y a Amaia le ha parecido un plan estupendo preparar una pizza los dos juntos. Eso sí, le ha dicho que el marisco no le gustaba mucho y que no le gustaba el pulpo. José Ángel ha sentido que igual era porque no había probado un buen pulpo. Lo que sí le ha confesado es que se había olvidado de su nombre y ha sido algo mutuo.
Se lo han tomado con humor, pero a él le ha costado un poquitín más de la cuenta retener que su cita se llamaba Amaia y no Amalia ni Amelia. En el tema amor, José Ángel le ha dicho que había tenido seis parejas serias y ella le ha explicado que el primer filtro que poner para las relaciones es que los chicos escriban bien.
Ella también ha querido saber si José Ángel fumaba y al saber que sí, le ha dicho que podía ser un problema y que había rechazado a chicos por eso. Él no se ha preocupado demasiado y ha cambiado de tema advirtiéndole de que tenía algo entre los dientes, un detalle que a ella le ha gustado.
Amaia le ha contado que para ella es muy importante la comunicación en pareja y que, en el tema sexual, también muy importante, le gusta que la dominen. Ella estaba encantada e incluso, le ha dicho que le gustaba su look con pelo largo, algo poco habitual. En el momento de la decisión final, los dos han dicho que sí querían repetir, pero ella le ha advertido que el tema del tabaco y la distancia le echaban un poco para atrás. “Ya estoy mirando vuelos de Santiago a Bilbao”, le ha respondido él.