Noelia se ha presentado como una chica apasionada que se quiere comer la vida a bocados. Le apasiona el mundo del crossfit y tiene la sensación de que no le ha ido bien en el amor porque no se ha fijado en el patrón adecuado.
Víctor, su cita, también es un apasionado del crossfit y la halterofilia “llevo toda la vida haciendo deporte”. Al verle, Noelia ha sentido ganas de tocarle los músculos “tocarle ese cuerpo esculpido, parece un dios”. A él también le ha gustado mucho al verla y han comenzado la cita hablando de sus respetivas profesiones.
La cena ha comenzado hablando de deporte y los dos han coincidido en su pasión por el entreno, ya sea en modo crossfit o en modo halterofilia. A Noelia también le ha gustado mucho que su cita viviera solo para poder tener independencia si va a visitarle a Valencia.
Los solteros han hablado sobre sus experiencias sentimentales y los dos han tenido parejas estables, pero ya llevan bastante tiempo sin encontrar lo que buscan. Noelia no se ha fijado en los chicos adecuados y Víctor le ha confesado que es un tipo muy exigente porque está muy bien solo y necesita a alguien que le mejore sus momentos de soledad.
Noelia ha querido saber si a su cita le gustaban los animales y le ha mostrado que llevaba tatuado el nombre de uno de sus gatitos en la muñeca “se llama Pericles”. A Víctor le ha sorprendido y le ha confesado un “a mí me llaman Heracles”. A Noelia le ha entrado la risa y le ha confesado que a ella le recordaba a un dios.
Superado el momento piropos correspondidos, los dos solteros se han dado un sí a seguirse conociendo y a que ella fuera a Valencia para que Víctor le enseñara los rincones bonitos de Valencia.