Javier, el soltero de ‘First Dates’ al que nunca le han echado su edad: ¿Cuántos años crees que tiene?
Javier solo liga con mujeres de entre 27 y 30 años, mucho menores que él
Javier sorprende a su cita con una mentira piadosa: “Ya estoy mucho más relajado”
A Javier le da absolutamente igual lo que la gente opine de él, lo único que le duele es la gente que aprecia. Carlos Sobera ha tenido la sensación de que tenía pinta de ligón, pero él le ha dicho que no ligaba mucho y que cuando lo hacía eran con chicas más jóvenes que él. Siempre le han dicho que aparenta muchos menos años de los 46 años que tiene y eso no le termina de gustar.
En el amor es muy sentimental “me vuelco demasiado, soy muy romántico” y no sabe si gusta porque hay mujeres que buscan a “alguien más chulito, más castigador, macho alfa”. Eva, su cita, es una mujer súper apasionada “lo doy todo” y siente que por eso se lleva las leches que se lleva. Al ver a Javier ha sentido que era “majete”, pero estaba nerviosa. Él le ha dicho que también lo estaba “si fuera un filete tendrían que tirar la mitad, soy todo nervios”. Carlos Sobera ha querido que Eva le dijera qué edad pensaba que tenía Javier y ha acertado, le ha echado unos cuarenta y le ha contado que ella tenía 47.
Al comenzar a charlar, Javier se ha olvidado de la primera impresión en la que Eva no le había gustado y le ha parecido una mujer agradable. Él le ha contado que tenía tres hijas, pero que llevaba mucho tiempo soltero. Eva lleva tres años soltera y él ha querido saber qué necesitaba para estar feliz. Ella le ha explicado que le gusta tener contacto diario por lo menos al principio.
Eva no ha sido madre y no cierra la puerta por completo, aunque sabe que ya es un poco tarde. Él le ha dicho que ya se había plantado y que ni, aunque se volviera loco. Javier le ha dicho que buscaba respeto y confianza, aderezados con un poco de feeling, conversación en la que él ha comenzado a sentir cierta conexión. Eva ha querido saber si su cita era mentiroso y él le ha dicho que no, y que no podía desconfiar de la gente de primeras.
Los solteros se han confesado que estaban un poco nerviosos y que en el día a día eran mucho más alegres. Él le ha soltado una mentira piadosa diciéndole que estaba más relajado porque no lo estaba. A los dos, la cita se les ha hecho muy corta y se han quedado con ganas de seguirse conociendo un poquito mejor.