La cita de Anae y Jesús hace aguas en su primera conversación: “Le he puesto todos los puntos negativos del mundo”

  • Anae, muy crítica con Jesús: “Eres arrítmico, te falta sangre”

  • Jesús no se conforma con un físico: “Puede tener un físico espectacular, pero no somos compatibles en personalidad”

Ana Eugenia, Anae para sus amigos, es una mujer que dentro de diez años se ve siendo ama de casa y teniendo una bonita familia. Se ha dedicado al mundo de la moda y ahora hace moda flamenca. Busca a una persona que le sume, que sea cariñoso, atento… “lo básico”. Sus padres se divorciaron “fue una separación traumática y quiero todo lo contrario para mí”. Físicamente le gustaría que fuera moreno, deportista e igual de alto que ella “que se cuide”.

Jesús, su cita, es un tipo muy pasional, que se fía mucho de su intuición y en pareja muy romántico. Buscaba a alguien que le rompiera los esquemas y Anae le ha parecido una chica muy guapa, pero no ha sido correspondido “no he sentido el flechazo”. Eso sí, le ha gustado que se dedicara a la seguridad privada y que estuviera opositando para ser policía “a mí me flipa un uniforme”.

Anae no ha sentido el flechazo que esperaba y le han bastado cinco minutos de conversación con Jesús para saber que no quería nada absolutamente con él. Ha comenzado interesándose por el tema de la policía que era algo que a él le venía de familia, pero le ha puesto el primer punto negativo al saber que no sabía bailar bachata, el segundo por fumar “no le besaría por nada del mundo” y todos los puntos negativos del mundo por no querer ser padre. Él también ha sentido que la cita iba cuesta abajo y sin frenos.

Conscientes de que la cita no iba a ningún sitio, los solteros han intentado pasar el rato lo más agradable posible y han seguido contándose sus metas. Anae le ha dicho que le gustaría tener una bonita familia para salir a pasear los domingos y Jesús le ha confesado que él no quiere tener hijos porque siente que le queda mucho por viajar. Anae sin embargo, ya ha viajado mucho “estuve tres mese viviendo en la India, he ido a Dubái, lo intenté en Milán, pero no daba el perfil…”.

Los dos lo tenían claro, pero cuando ha comenzado a sonar la música han despejado todo tipo de dudas. Anae ha sentido que su cita era “un soso”, que no le despertaba nada y que ni siquiera le había hecho reír durante la cita. La soltera no se ha cortado un pelo y le ha dicho a la cara que le faltaba sangre, pero Jesús ha sido muy educado y le ha explicado que él solo se suelta con las chicas cuando nota que hay química, y que con ella no había sentido nada de nada.