Jesús se define como un caballero y tiene claro que a la mujer hay que tratarla bien y “darle algún capricho”. Ha saludo a Carlos Sobera con un “el hombre diez” y él le ha respondido con un “un ocho y medio”. El presentador se ha creído que había sido comercial y le ha prometido que en los postres le iba a dejar cantar. El soltero busca a una mujer, sobre todo, humilde.
Julia, su cita, se ha puesto de rojo y nos ha dejado claro que la fama que tiene de antipática no es cierta “soy seria”. El presentador la ha presentado como un “bombonazo” y Jesús le ha dado la razón. El soltero se ha alegrado de que Julia fuera de Talavera de la Reina porque él vive en Ávila, pero está deseando vivir en Madrid.
En la mesa, Jesús ha querido saber el estado civil de su cita porque él tiene claro que no quiere viudas en su vida. Julia le ha contado que se separó y luego se quedó viuda, pero ha necesitado concretarle que sucedió primero para que él se quedara tranquilo. El soltero tiene la sensación de que las mujeres viudas solo le hablan de sus maridos y él no quiere a nadie que le hable del pasado. Incluso, ha llegado a afirmar “estaría con una prostituta porque a mí no me importa el pasado, me importa que me haga feliz”.
Jesús también ha querido saber qué edad tenía y ella ha intentado resistirse, pero le ha terminado confesando que tenía uno menos que él, algo que le parecía mucho “le veo muy mayor para mí, y mira que es un año”. Julia ha sentido que el físico de su cita estaba muy envejecido.
El soltero tiene muy claro lo que no quiere y le ha dicho que quería a una mujer que no fumara y que no fuera “muy pinturera”, Julia ha querido saber qué era eso y al saberlo, le ha dejado claro que ella iba a la peluquería todas las semanas. Él también le ha dejado claro que era un tipo fiel y que quería a una mujer que también lo fuera. A su edad, el sexo es un extra y él lo que busca es una compañía.
Julia ha sentido que su cita hablaba mucho “pero no dice nada” y es que a ella le gusta la gente con conversación “hablar por hablar, tampoco”. En el momento del postre, Jesús se ha venido arriba y ha demostrado su arte en el salón cantando por Camilo Sesto. A Julia no le ha parecido que lo hiciera muy bien, pero sí le ha visto feliz.
Él le ha dicho que podían tener una segunda cita para comprobar si ella quería seguirle conociendo y le podía dar las cosas que él exigía, pero Julia le ha dicho que podían irse juntos a un karaoke y pasarlo bien, pero nada más.