Torcuato liga cuando se puede, pero no tanto como lo hacía cuando era joven. Es de un pueblo de Granada, pero ha estado más de cuarenta años trabajando en Suiza y acaba de regresar al sur. Quiere encontrar una mujer con la que poder disfrutar de la vida y no que se tenga que quedar en casa.
Pilar, su cita, se pone y hace lo que le da la gana “no tengo que dar cuentas a nadie”, sus hijos ya son mayores y siente que es su momento de vivir. Al verla, Matías ha flipado con su pelo de colores y Torcuato se ha quedado un poco sorprendido y ha mentido “cada uno hace lo que quiere”, pero la verdad es que “no me ha gustado mucho”. Eso sí, han descubierto que vivían muy cerquita y a ella le ha gustado “más o menos mi prototipo, no es el Jean Claude Van Damme, pero a esta edad, qué vamos a pedir”.
La soltera ha comenzado la cena preguntándole la edad a Torcuato y no se ha creído que tuviera 69 años. Él no entendía el motivo y porque le estaba diciendo que era mayor que ella e incluso, le ha pedido a Laura Boado que le confirmara su edad, pero Pilar le veía estupendo “tiene la cara estirada, como si se la hubiera planchado”, ella no le había echado ni 60 años.
El soltero le ha confesado que se cuidaba y que no cenaba porque por la noche su cuerpo no digería la comida. Pilar también se ha fijado en que no tenía canas y el soltero le ha confesado que él también se tintaba el cabello.
Torcuato le ha dicho que buscaba una pareja y ella se ha reído “normal, no vas a buscar una puerta”. Ella le ha dicho que también quería conocer a alguien e ir poquito a poquito, y no ir a un aquí te pillo y aquí te mato. A él le ha gustado que fuera muy sincera, pero ella no le ha encontrado ningún acento suizo.
A Pilar le ha sorprendido que a Torcuato le gustara bailar, pero ha tenido claro que los dos se lo podían pasar muy bien y que vivían muy cerquita de hecho, ya han comenzado a hacer planes.
En el reservado, los solteros se han lanzado a la pista de baile y lo han intentado. Pilar estaba encantado porque no es fácil encontrar a un hombre que sepa bailar, pero él le ha dicho que podían tener una segunda cita como amigos o para tomar un café, pero que no sentía que pudieran tener una relación. Torcuato le ha dicho que lo sentía, pero ella le ha dicho que no había nada que sentir, que era muy pronto para hablar de relación.