La sorprendente reacción de un soltero de ‘First Dates’ con la cena: “¿Te pican los espaguetis?”

  • La fotografía cambió la vida de Carlota: “Antes ni comía ni dormía, no hacía nada”

  • Álex alucina ante el deseo de su cita: “Tengo un colmillo de plata”

Carlota se ha presentado en ‘First Dates’ como fotógrafa de arte urbano y ha asegurado que tener una rutina le ha cambiado la vida “antes no comía, no dormía, no hacía nada… ahora soy feliz”. Busca a un chico también interesado en el arte urbano y Carlos Sobera le ha presentado a un DJ.

Álex, su cita, es DJ y sueña con ser un DJ conocido al que a la gente le entren ganas de ir a escuchar. Al ver a Carlota le ha gustado su físico y que no fuera vestida como todo el mundo “tiene su propio estilo”. Ella a él también le ha causado muy buena impresión y rápidamente se han puesto a hablar de música urbana y techno.

La cena de Carlota y Álex ha comenzado hablando de música, fotos y cantantes famosos. Los dos han conectado y al DJ le ha parecido genial que su cita fuera fotógrafa incluso, le ha pedido una sesión de fotos. Al probar los espaguetis, el soltero ha sentido que picaban muchísimo, pero ella no lo ha sentido igual “no puedo con el picante ni con el sushi”. Carlota se ha sorprendido y le ha dicho que su comida favorita era el sushi. Menos mal, que a los dos les gusta la pasta eso sí, sin verduras para él.

Álex le ha dicho a su cita que le gustaba mucho su pelo y su estilo. Los dos son team plata y ella la ha confesado que le encantaría llevar “un colmillo plata”. Álex ha flipado y le ha dicho que el diamante que tenía en el diente no era el primero “me trague un corazón”.

Entre los jóvenes ha surgido mucha conexión y han podido hablar de cualquier cosa. Cuando ha llegado el postre, ella le ha ofrecido su tarta de queso, pero él le ha dicho que era intolerante a la lactosa y que su coulant de chocolate estaba “muy empalagoso”. Carlota ha sentido que su cita era muy especialito con la comida, pero él le ha dicho que no.

Álex ha insistido en pagar la cena y ella ha aceptado la invitación convencida de que no iba a ser su última cita. Al soltero le ha dado un poco de miedo la distancia, pero ella se va a mudar a Madrid.