Irina se define como una persona “batiburrillo” porque igual te escucha un bolero que un poco de K-Pop, le ha dicho a Carlos Sobera que es una pesimista optimista, pero que no sabe cómo es su personalidad y que para eso va al psicólogo. Le gustaría conocer a una chica, pero se define como una mujer bisexual. En su vida no ha tenido una cita a ciegas “de ir ciega, sí, pero a ciegas, no”.
Aída, su cita, asegura que su cerebro va a mil por hora y que se le cruzan las ideas. Es cantante, canguro y cualquier cosa que le sale, pero su pasión es la música “mi ilusión es llenar el Palau Sant Jordi”. Es bisexual “carne o pescado, lo que se sirva”. Al tocar a Irina ha sentido que era una mujer con una mano suave, pero no percibido nada más.
Los solteras han adivinado sus lugares de procedencia y se han pasado un rato muy divertido, que han titulado la “porno ostra”. Aída se ha pedido ostras y lo ha pasado realmente mal para comerse algo que no sabía ni cómo era “estoy metiendo la lengua y chupando algo que yo no sé…”.
Aída ha querido saber si su cita era aventurera e Irina le ha dicho que no era de las que se iban a escalar el Kilimanjaro, pero que sí. Eso sí, no le ha gustado nada que la dijera que le notaba tintes frikis por su voz “me estás insultado, que si soy de Murcia, soy friki…”, pero le ha gustado que su cita fuera tan extrovertida porque ella no lo era.
Irina le ha contado que había tenido una relación de tres años, pero que le puso los cuernos el 24 de diciembre y que estaba deseando celebrar una nueva Nochebuena “me voy a poner unos cuernos de Rudolf” y se ha sorprendido cuando Aída le ha dicho que había estado con una mujer y con varios hombres, pero que su relación más pasional había sido con una mujer. Al principio le ha costado soltarse, pero ha sentido que Aída había pillado su humor y que no se enfadaba por sus bromas.
En el reservado, las solteras se han atrevido a bailar bachata e incluso, perrear con lo ojos tapados. Las dos han disfrutado de una cita muy divertida y se han dicho que sí a una segunda cita sin verse. Cuando es han quitado los antifaces, Irina le ha hecho una petición a su cita “no me llames fea en prime time que ya me pusieron los cuernos el 24 de diciembre” y ambas, han mantenido su decisión.