Eva ha entrado en ‘First Dates’ con muchísima energía y asegurando ser una mujer muy extremista, pero positivo y alegre. Es madre y cada día intenta ser mejor que el día anterior. Le gustan los chicos naturales, que sean buenas personas y sobre todo, que le hagan reír.
Miguel, su cita, cree que todo el mundo debería tener un Miguel en su vida “por la alegría que desprendo”. Al verle, Eva ha sentido que olía muy bien y le ha gustado, a él también le ha gustado ella “es una chica que te entra”. Los dos viven cerquita y han bromeado sobre la fama de la gente de Tarrasa.
Eva y Miguel ha conectado desde el primer momento y superado el momento edad, él es bastante más joven que ella, todo han sido risas y bromas durante la cena. Él ha comenzado bromeando sobre la cena y ella ha entrado rapidísimo al juego, vacilándole con la posibilidad de probar su tataki de atún.
Miguel le ha advertido de que él era un tipo muy clásico y que no le gustaba nada salir de fiesta. A Eva no le ha importado mientras no se meta en que ella pueda salir cuando le apetezca y el ha dicho que hay muchas formas de salir. También han bromeado con el tema sexual y él le ha dicho de risas que era muy escandaloso, pero no es cierto “no me gusta asustar a los vecinos”.
Eva ha alucinado cuando el equipo de staff de ‘First Dates’ ha entrado en el salón cantando el cumpleaños feliz a su cita. Miguel ha bromeado y le ha dicho que le tenía que darle un regalo, al principio le ha propuesto un baile, pero le ha confesado que su deseo era otro “quiero un regalo muy fácil, en forma de sí”.
Los dos se han reído muchísimo, se lo han pasado genial y aunque ella le ha advertido de que era un muy difícil de enamorar, han descubierto que los dos están como una cabra y se han ido directos a tomarse algo juntos.