Juanjo tiene claro lo que busca en ‘First Dates’: “Busco a una loba”

  • Ángeles corta a su cita en seco al escucharle decir que hay darle alegría al cuerpo: “Macarena”

  • A Ángeles no le gusta que su pareja baile cada día con una: “No soy celosa, pero eso, no”

Juanjo es un soltero súper expresivo, súper emotivo y súper de todo “guardarse cosas es una tontería, a disfrutar de la vida”. Está viviendo su segunda juventud tras romper una relación de mucho tiempo y asegura que no tiene todo el tiempo que necesita para todo lo que le gusta hacer “ir a bailar, montar en bici, ir al cine”. Está buscando una chica que le siga el ritmo y si puede ser un poquito rellenitas, con un poquito de trasero y con una sonrisa súper alegre.

Ángeles, su cita, es una mujer a la que le gusta salir a la montaña, hacer paellas con amigos y que asegura que nunca está en casa. Al verla, Juanjo ha sentido que era un poquito más rellenita de lo que a él le hubiera gustado. Ella tampoco ha sentido un flechazo “no me fijaría en él por la calle”, pero han brindado al saber que los dos eran de la terreta y se han contado que tienen hijos. Ella cuatro hijos y dos nietos, y Juanjo una niña de 14 años.

Ya sentados en la mesa, Juanjo se ha interesado por los fracasos amorosos de su cita y Ángeles le ha contado que ha tenido tres relaciones largas de “ocho, diez y once años”. Él acaba de salir de una relación de 28 años, pero tiene claro que hay que vivir la vida y disfrutar. Le ha contado que todas las tardes va a bailar y a ella es algo que le encantaría, pero que no tiene tiempo para hacer.

Convencido de que no hay que parar ni un segundo, Juanjo ha visto que su cita tenía una excusa pobre para no ir a bailar porque trabajar trabajamos todos y ella ha sentido que igual él era demasiado nervioso “yo soy más tranquila, después del uno, el dos”. Y cuando él le ha dicho que había que darle alegría al cuerpo, le ha parado con un “Macarena”. 

La soltera ha querido saber qué estaba buscando su cita y ha flipado al escucharle decir “una loba, busco a una loba”. Ella puede ser todo lo loba que tu quieras en una relación, pero así de primeras, no. Le gustan las cosas despacito y a su tiempo. Él ha sentido que venía con el freno de mano echado por las desconfianzas del pasado y no le ha gustado. Es más, le ha contado que él habla y conoce a muchas chicas por el baile, y que eso de ir con trabas desde el principio, hace que las cosas no fluyan.

Ángeles le ha escuchado muy atenta y asegura no ser celosa, pero eso de que conozca a muchas chicas cada tarde, no “no me ha gustado”. En el reservado, Juanjo se ha convertido en profesor de bachata y Ángeles ha sentido que iba muy lanzado “demasiado”. De hecho, en el momento que ha comenzado a darle vueltas, ha salido pitando a comerse el postre. Él le ha dicho que había que ir despacio en la bachata y ella lo ha achacado a los nervios, pero en realidad es que no le estaba gustando bailar con él.

Juanjo le ha dicho que no es veía viviendo su vida todavía muy familiar y ella le ha dicho que le notaba demasiado movido para ella. Incluso, le ha confesado que eso de que bailara cada día con una no le gustaba. Él se ha puesto serio y le ha dicho que solo es bailar, pero a Ángeles no le ha convencido.