Carmen se ha presentado en ‘First Dates’ como una mujer que no era guapa y escultural, pero que llamaba la atención. Según le ha explicado a Carlos Sobera siente que los hombres la tienen un poquito de miedo y busca a uno con el que conectar. De hecho, le ha soltado al presentador “tú y yo hemos conectado” y le ha dejado sorprendido hasta que le ha dicho “nos estamos mirando a los ojos”.
Al ver a Ramón, su cita, ha sentido que no era el hombre que esperaba, pero ha comenzado a conocerle pasito a pasito. Nada más comenzar la cena, Ramón le ha dicho que llevaba mucho sin pareja porque le estaba costando muchísimo superar su divorcio y aceptar que ya no podía vivir con sus hijos y ella le ha cortado en seco.
Carmen le ha dicho que tenía que salir de esa situación de tristeza y mirar hacia adelante porque estaba en un momento en el que “como en Narco, plata o plomo, o tiras hacía adelante o adiós”. Ella tiene también problemas familiares y no se le ocurriría jamás contárselo a nadie en una primera cita.
Han hablado de viajes, de la distancia que les separaba, de sus aficiones y poco a poco han ido encontrando cosas que les resultaban interesantes el uno del otro. Pero ha sido cuando ha comenzado a sonar la música y se han bailado la ‘Noche ochentera’ cuando han saltado las chispas. A Ramón le ha gustado el movimiento de cadera de Carmen y ella le ha subido varios puntos al verle darlo todo al ritmo de la música.
No saben a dónde llegarán, pero sí que quieren recorrer el camino que separa Ciudad Real de Alicante para ver qué sucede entre ellos.