Luis y Mau han venido a ‘First Dates’ buscando una pareja estable, pero al ver que tenían dos conceptos opuestos de relación, han tenido claro que, para una noche de placer y sushi, eran más que compatibles.
Luis se ha puesto nervioso y la cabeza se le ha hecho un ocho al escuchar a Mau decirle que él buscaba una pareja en la que reinara la libertad “que cada uno pueda hacer lo que le de la gana”. No se refería concretamente a tener una pareja abierta, pero sí a que cada uno podía hacer sus planes y quedar con otros amigos, y no tener la necesidad de estar todo el rato juntos.
El soltero se ha presentado como una persona muy celosa y no ha dudado en explicarle a su cita que no estaba preparado para algo así porque es muy desconfiado. Desde ese momento, han tenido claro que no iban a tener nada serio y han cambiado el tono de la conversación.
Luis ha querido saber qué era lo más guarro que había hecho su cita sexualmente hablando y Mau le ha contado que tener sexo en la playa delante de la gente “me puso un montón”. A él le encantaría convertirse en una bandeja de sushi viviente y que su pareja comiera de él “que me vayan comiendo poco a poco”. A Mau le ha parecido una idea estupenda “se puede intentar” y él ha querido saber si sabía hacer rolles de sushi “Eras cocinero, ¿no?”.
Tanto Mau como Luis han sentido que no se iban a casar, pero que si él bajaba a Conil de la Frontera (Cádiz) o él subía a Barcelona podían verse como amigos y tener sexo “empótrame contra la pared, dame guerra”.