Uri es un chico muy extrovertido, muy sincero y un poco hater, algo que siente que puede asustar a los chicos. Es productor de tele, reportero y entrenador de patinaje artístico. Empezó a patinar con 8 años y se cansó del deporte de elite. Le gustaría conocer a alguien con salud mental y estabilidad en todos los sentidos.
Axel, su cita, nos ha contado que su padre estaba “cagando en el váter de casa y me iba a poner Jerónimo, pero al final fue Axel”. Al saber que Uri estaba dispuesto a marcharse si su cita no le gustaba, Carlos Sobera ha escondido a Axel tras la cortina, pero al vele, ha visto a un chico muy mono y le ha dicho que se llamaba igual que un salto de patinaje artístico, que es a lo que él se dedica.
A Axel le han gustado mucho los labios de Uri y le ha contado que era diseñador de interiores, el sueño frustrado del soltero, quién le ha dicho que le iba a enseñar su reforma para conocer su opinión.
Mientras comenzaban a cenar, Axel le ha dicho que tenía 34 años y no ha adivinado que Uri tuviera solo 27. Él ha querido saber si hacía deporte y no le ha gustado mucho que no fuera su pasión, pero ha sentido que igual él le podía enganchar al mundo del crossfit. Axel le ha contado que él también patinó de pequeño, que tiene algunos recuerdos, pero que “me di un guarrazo y le dije a mi madre ‘nunca más’”.
Uri ha sacado una red flat al saber que Axel solo había durado 2 años en pareja y que hacía 10 años que no tenía novio. Sin embargo, al saber que había viajado mucho y que había estado viviendo fuera de España ha sentido que igual era normal y que sus vivencias le podían aportar muchas cosas. Los dos han empezado a sentir que podían encajar y que sentía la inquietud de seguirse descubriendo. De hecho, los dos quieren volver a Tailandia y no descartan hacerlo juntos.
Axel ha sacado el tema del horóscopo y Uri le ha confesado que él era muy de horóscopo, pero ha respirado tranquilo al saber que era Libra y no Aries que es su signo incompatible en el amor. Los dos han estado de acuerdo en que son muy positivos y que no quieren nada tóxico en su relación.
Uri puede resultar un poco creído, pero asegura estar muy seguro de sí mismo y no ser nada celoso “sé que nadie te va a dar lo que yo te doy”. Axel se ha reído, pero le ha parecido estupendo que también fuera una persona segura.
Según iban pasando los minutos de la cita se iban gustando más y más, y en el momento de la decisión final han tenido claro que quería seguirse conociendo y que se iban directos a que Axel le enseñara cómo había decorado su habitación.