Cristina tiene 20 años, es de Barcelona y trabaja de seguridad en el aeropuerto. En la barra de ‘First Dates’ le ha dicho a Laura y a Matías que estaba muy nerviosa a ver qué venía. Le han engañado en las dos relaciones que ha tenido y es que cuando se enamora pierde un poco la cabeza. Busca a un chico que se cuide porque ella hace un tiempo que comenzó a cuidarse y quiere montar su propio negocio de repostería healthy.
Erick, su cita, juega en un equipo de portero de fútbol sala. La gente le ve como el típico chulo, pero asegura ser todo lo contrario, pero efectivamente, al verle, Cristina ha exclamado un “puf, vaya chulo me han puesto”. Él sin embargo, ha sentido que ella era una chica muy mona.
Mientras cenaban, Erick le ha contado que había comenzado una carrera y que no le había gutado por lo que este año solo se dedica a entrener niños. Han coincidido en que a los dos les encanta el deporte, pero que los lune son se entrena. Cristina le ha dicho que ella se quería ir de Barcelona y que ha acabado viviendo con dos amigas a tres calles de sus padres, pero que su piso es una locura total y que tiene un gato un poquito particular.
Al hablar de amor, Cristina le ha dicho que le había puesto los cuernos y él no lo ha entendido porque es una chica muy mona y muy maja. Él creo que en una pareja existen tres pilares, la confianza, la comunicación y el respeto. Ella ha querido creérselo, pero al ver su cara, Erick le ha dicho que la gente piensa que es un chulo, pero que no es verdad.
Cuando les han servido el postre, Erick le ha contado a Cristina que le gustaba mucho cocinar y que no le salía nada mal la tarta de queso. A ella le ha gustado saberlo porque le encanta la repostería y le ha hablado de sus deliciosas tortitas de avena “las pruebas y me pides matrimonio”, él también hace unas muy ricas y han sentido ganas de probarlas.
Eso sí, cuando él le ha dicho que prefiera la tarta de queso fría a la caliente, ha perdido algún que otro punto “Te quedas en el 8,5”. Los dos se han caído muy bien, la cita se les ha hecho muy corta y se han quedado con ganas de más, y como viven cerquita.