Antonio y Emiliana comienzan su cita en ‘First Dates’ bailando un pasodoble: “Si hay que ir se va”
A Antonio le gusta todo de su cita en ‘First Dates’: “¿Qué te gusta el cochino? Hasta los andares”
Antonio siente un flechazo al ver a Emiliana: “Esta me gusta a mí”
Antonio lleva desde los 7 años trabajando en el campo y asegura que no hay nadie que Andújar que recoja más algodón que él. Se ha puesto como un pincel para encontrar el amor y le ha contado a Matías que, aunque le duele un poco la rodilla, no para y que se está haciendo una casita. Está buscando a una mujer buena y que sea “campera, las ciudades…”. Si puede elegir las prefiere bajitas “llevan los tacones mejor que una grande”.
A Emiliana, su cita, le gustan los hombres que sean buenas personas y que se les vea venir. No le gustan los hombres que miran a una y a otra “se le van los ojos”. Al verla, Antonio ha afirmado un “está muy bien” y ella al verle le ha soltado un “yo te conozco”, pero ha resultado que no porque él tiene familia en Granada, pero hacía muchísimos años que no pasaba por allí.
La cara de Antonio le ha transmitido mucha nobleza a su cita y cuando Laura le ha contado al soltero que la pasión de Emiliana era el baile, él se ha mostrado dispuesto. “Si hay que ir, se va”, ha asegurado la soltera antes de lanzarse a bailar junto a su cita un pasodoble de la Más Grande. “Aquí hay tema que te quemas”, ha dicho Antonio con sonrisa picarona.
Ya degustando la cena, los solteros se han contado cuáles eran sus respectivos pueblos y Antonio se ha interesado por las cejas tatuadas de Emiliana. Ella le ha dicho que habían perdido el color y que tenía que renovarlas, pero a él ha dado igual porque le gustaba todo ella. No ha dudado en decirle que le gustaba mucho su corte de pelo y el color que había elegido para maquillarse los labios. Ella se ha sentido muy halagada.
Los solteros estaban encantados de haberse conocido y todo lo que iban descubriendo les iba gustando “le veo sincero, luego se hay algo oculto…”. Los dos llevan muchos años divorciados y tienen claro que el amor se demuestra de puertas para dentro, que no les gustan los achuchones en público y que cuando llegan los cuernos es porque algo ya no funciona en la pareja.
Antonio ha tenido claro que Emiliana era una buena mujer y que le gustaba un montón, algo que ha hecho que todo le fuera gustando de ella. Le ha dicho que tenía las tres B y que el pajarito iba ha llegar al nido. Emiliana estaba ruborizar y encantada con tanto piropo, y es que le ha dejado claro que de ella le gustaba todo “¿Qué te gusta el cochino? Hasta los andares”.