Pedro es un soltero de familia numerosa “tengo cinco hermanas y un hermano, tengo una melliza y los quiero a todos un montón”, pero no quiere tener hijos. Eso sí, le gustan los niños y está estudiando magisterio “mi idea es ser funcionario”. Busca a una chica divertida, dinámica, que le guste hacer cosas, pero no le importa que sea o no fogosa porque él no lo es mucho y siendo sincero “el sexo cansa y a veces no apetece porque sudas”.
Eva, su cita en ‘First Dates’, está en un nivel de la vida diferente a sus amigas que ya están a punto de ser mamás y él está con primeras citas. Al ver a Pedro, no le ha parecido “guapo que flipas”, pero le ha parecido muy tierno y mono. Los dos son de Madrid, pero de pueblos un poquito lejanos. A él ella también le ha gustado y la cosa ha comenzado con ganas.
Ya sentados en la mesa, Elsa Anka les ha leído la carta y Pedro no sabía qué pedir “¿Unos filetitos de pollo no pueden ser?”. El joven le ha confesado a su cita que para comer tenía 5 años y ella se ha desilusionado un poco. Su ex también era muy especial para comer y lo pasó mal porque a ella le gusta probar cosas nuevas.
Superado el tema de la comida, los jóvenes han hablado de sus estudios y sus planes de futuro, a ella le gustaría trabajar de asesora de imagen, pero a empezar a hacerlo en una gran superficie de muebles. Él trabaja de repartidor en el Burger.
“Dime que no te he manchado, ¿Te he manchado?”, ha afirmado Pedro muy preocupado al ver que había manchado de tomate a su cita al intentar comerse unos espaguetis que seguramente ni le gustaban. Eva le ha dicho “Creo que sí, he notado algo por aquí”, entre risas. Pedro estaba ruborizado y no se lo podía creer porque su cita iba de blanco y las manchas de tomate no salen.
Pedro ha querido saber a qué partido político votaba Eva y ella le ha dicho que le iba a responder, pero que en una primera cita no se habla de política “mi color combina con ‘First Dates’". Él ha respirado tranquilo y ha intentado hacerle creer que su color era el verde y a Eva casi le da algo “lo único que pedí es que no fuera de VOX”. Finalmente, el joven le ha dicho que él era un poquito más de izquierdas que ella, que podían ser compatibles y que eso era todo lo que iban a hablar de política en la cita.
El soltero le ha contado que tenía 5 hermanas y un hermano, y a Eva le han entrado los nervios porque se ha imaginado conociendo a 5 cuñadas y le han entrado los sudores. Encima, Pedro le ha dicho que le iban a analizar, juzgar y seguramente criticar. Eso sí, antes de decirle que no, que sus hermanas eran muy majas y que la iban a tratar muy bien.
En el momento de la decisión final, Pedro ha dicho que sí quería seguir conociendo a Eva porque tenían muchas cosas en común, pero ella le ha soltado un “no” y él joven lo ha pasado mal, muy mal. La soltera ha querido devolverle todas las bromas que él le había gastado durante la cita y Pedro le ha dicho que eso no le libraba de conocer a sus hermanas eso sí, “lo más tarde posible”.