Alexis se ha presentado en ‘First Dates’ como una chica que es modelo pettit “quiero demostrar que todo el mundo puede ser bajito, aunque sea bajito o filipino como yo”. Nació en Arabia Saudita, pero se considera filipina de Canadá. Sus bisabuelos eran españoles y hay algo en España que le hace sentirse muy cómoda aquí. Busca a un chico que sienta pasión por la vida y está feliz de haber podido sentir el amor.
Carlos Sobera le ha advertido que su cita era un tipo guapo y que se llamaba Jonathan. Un joven que se define como un tipo simpático, empático, divertido “miro la vida con positividad”. Tiene ganas de enamorarse y empezar a ver la vida de otro color. Al verle, Alexis se ha quedado sin palabras “es guapo, alto y tiene un pelazo…”. Él también ha tenido muy buena impresión y rápidamente han comenzado a hablar de sus orígenes, él es medio asturiano medio italiano y no sabe mucho inglés, pero no le importaría practicar con ella.
Alexis no le ha sentado muy bien que Jonathan le confesara que no recordaba su nombre, y le ha dicho que se lo iba a preguntar varias veces durante la cena, pero él le ha dicho que no se preocupara porque ya no se le iba a olvidar. Los dos se han gustado mucho y estaban nerviosos, pero hablar sobre sus idiomas natales y decirse cositas en francés y en italiano, les ha ayudado a relajarse y fluir.
La joven ha querido saber cuáles eran las aficiones de su cita y Jonathan le ha confesado que le encanta viajar, algo que ella puede hacer libremente porque es nómada digital. Respecto al deporte, él le ha dicho que no le gustaba mucho y que iba al gimnasio arrastrado por su amigo. Alexis practica boxeo y le ha contado que le había ayudado muchísimo a sentirse segura porque había sufrido estrés postraumático tras una agresión sexual y que cada semana iba a visitar a su terapeuta.
Sin previo aviso, le ha soltado un “¿Recuerdas mi nombre?” y ha respirado tranquila al saber que Jonathan no lo había olvidado. Alexis no ha dudado en piropear a Jonathan y decirle que le gustaba su pelo, su barba y que era muy guapo. Él estaba encantado con ella, pero se ha mostrado un poquito más reservado. Ha querido saber cómo había sido la vida sentimental de la joven y le ha contado que él había estado casado, y que era padre de una hija.
En el fotomatón les ha tocado darse un beso apasionada y los dos se han olvidado de su timidez y se han lanzado a la piscina. De hecho, ella estaba tan emocionada que casi vuelve a besarle en el momento de la decisión final. Los dos se han quedado con ganas de más y quieren volver a tener una cita juntos.