Carlos, un soltero sexualmente experimentado en ‘First Dates’: “Sé dónde está el punto G, tenéis que probarlo”

  • Desirée respira tranquila al saber que su cita en ‘First Dates’ no es un heavy casposo: “¿Los exterminamos?”

  • A Desirée sus amigos la llaman “zorra galáctica” y “Odín, tengo un ojo ciego”

Carlos siente que ser heavy es “una forma de vida, una religión” y que los heavys de ahora son más blanditos. Su estilo varía en función “del venazo, hay veces que voy más goticucho del infierno, otras más rockero, otras más de los ochenta…”. A ‘First Dates’ ha venido con un look del día a día y confesando entre risas que es “un goticucho, parezco el hijo perdido de Drácula”. Se define como un tipo muy tranquilo y educado “tengo pinta de quitarte el bocadillo, pero no”.

En el tema sexual, asegura que ha explorado su cuerpo al máximo exponente “el cuerpo es una herramienta y hay que conocerlo… Yo si sé dónde está el punto G, me da igual que piensen muchos ‘turbomachos’… ¡Chicos, probadlo!”.

Desirée se ha presentado como una chica a la que sus amigos llaman “la zorra galáctica”, asegura que el zorro es su animal favorito y que siempre está pensando en planetas y galaxias. Al ver el collar de pinchos que lucía en el cuello, Carlos Sobera se ha sorprendido y la joven le ha explicado que era “un collar antiabrazos”. El soltero ha flipado al verla.

Los jóvenes han comenzado a cenar y Desirée ha sentido que le había tocado con “un heavy casposo” y le ha pedido que se soltara el pelo “no entiendo que tengas el pelo largo para llevar coleta”. Carlos ha intentado descubrir de dónde era el acento de su cita y ha sentido que igual se podría perder en Jaén, pero ella no parecía muy contenta y no le ha gustado mucho saber que su cita se ve solo en una casita con animales y huerto de mayor.

Al saber que a Carlos le gustaba viajar, Desirée le ha contado que le encantaría viajar a Escandinavia porque le apasiona la serie de Vikingos y sus amigos la llaman Odín “también tengo un ojo ciego”. Carlos se representa más con Floki, pero que cuando le hacen peinados vikingos en el trabajo le llaman Ragnar. A Desirée le ha gustado que le gustaran los vikingos, pero ha sentido que se tenía que esforzar un poquito más para parecer uno de ellos.

A ella no le gustan los heavies casposos que solo hablan de sus cosas, pero se ha encontrado con un heavy que le podía hablar de muchas cosas. Al saber que tenía 33 años, la joven le ha advertido y le ha dicho “Ten cuidado no vaya a ser que te ponga en una cruz y te de unos cuantos latigazos”. Algo que a Carlos no le ha asustado “esto es como todo, hay que poder y valer”.

Desirée no podía terminar la cita sin hacerle a Carlos una pregunta un poquitín comprometida y ha comenzado su cuestión con un “Yo no soporto a los heavies casposos…” y su cita la ha terminado “Dame la gasolina y los exterminamos”. La joven ha respirado tranquila al descubrir que su cita era un heavy de los buenos y que no soportaba a los heavies de pose. La soltera le ha estado juzgando por su apariencia y se ha dado cuenta de que estaba equivocada.

En el momento de la decisión final, él le ha dicho que sí quería repetir porque le había quedado misterio por resolver, pero ella le ha dicho que solo le veía como un amigo. A Desirée le gustan los hombres más petados “un fortachón” y Carlos es heavy, pero no fortachón.