Juan Jesús se ha presentado en ‘First Dates’ como un tipo que no tienes problemas porque se ha tomado la vida de cachondeo “me casé y salía todas las noches, así me veo”. Le ha explicado a Elsa Anka que está buscando a una buena mujer que le ponga los puntos sobre las íes “una mujer de carácter”. Asegura ser un tipo muy fogoso y que necesita tener sexo dos veces a la semana “si no haces el sexo meas para abajo y haces sexo meas para arriba”.

Teresa, su cita, se define como una mujer pasional, pero que no tiene sexo con cualquier de hecho, todavía no ha conseguido al hombre que la llene. Al ver a Juan Jesús se ha llevado una buena impresión porque se esperaba otra cosa y se ha sorprendido. Él también se ha sorprendido porque le suelen gustar todas las mujeres, pero Teresa no le ha gustado.

La soltera le ha comentado a Juan Jesús que le dolía la espalda y él ha creído que le venía bien un masajito, pero ella tiene claro que su espalda solo se la toca “su Carlos”. Hablando de dolores se han preguntado la edad y el soltero ha sentido que había mujeres con 54 años que estaban mucho mejor que su cita. Además, Teresa parecía una mujer tranquila y él está buscando a una mujer más loca “que me entretenga”.

Respecto a las aficiones, Teresa le ha dicho que está en un club y que van a hacer senderismo, pero a él lo que le gusta es salir, tomarse unas copas y vivir la vida “el cachondeo”. Eso sí, ha mirado a los ojos a su cita y ha sentido que había sufrido mucho en la vida. Teresa se ha sorprendido porque no le gusta mostrar sus penas en público, pero le ha gustado que su cita descubriera su interior.

Juan Jesús se ha echado las manos a la cabeza al saber que su cita llevaba más de cuatro años sin tener sexo “hay que quitar esas telarañas” y han bromeado con la posibilidad de que la soltera fuera virgen de nuevo. De hecho, el soltero se ha venido muy arriba y le ha propuesto entrar en el cuartillo de ‘First Dates’ para solucionar el atranco. Hasta Elsa Anka le ha visto muy acelerado y Teresa le ha explicado que los toros se torean despacito y luego ya se entra a matar.

Degustando el postre de chocolate, el soltero le ha confesado a su cita que le daban morbo los cerros “yo voy en el coche con una mujer que me gusta, veo los pinos y ahí cae seguro”. Juan Jesús tenía claro que Teresa no le gustaba, pero ya que había pisado el acelerador ha tirado para delante. En el fotomatón ha intentado por todos los medios tener un acercamiento con ella, pero la soltera le ha frenado porque a ella los hombres tan lanzados no le gustan nada.

Al ver que Teresa se resentía de la cintura ha asegurado que “a una mujer con la cintura mal no la puedes empotrar”, pero ha seguido intentándola besar. En el momento de la decisión final, ella le ha dicho que repetiría, pero si iba más despacio y él le ha dicho que no quería volver a verla porque buscaba a una mujer más lanzada.