José, ‘Cabana’ para sus amigos, no quiere engañar a nadie y se ha presentado afirmando “he sido un golfo”. Eso sí, también nos ha contado que un día apareció una persona en su vida que le hizo cambiar y madurar. Se dedica al mundo de la música y nos ha demostrado su arte para el “flamencotón”. Respecto a su nombre artístico, le ha explicado a Carlos Sobera que un día vio en la televisión un anuncio de Dolce & Gabbana “y dije ‘El Cabana’, ese rollo chulo, elegante, de mujeres”.
Las mujeres le gustan que le den alegría, que tengan su rollito y si es posible que sean “agitanadas, de barrio”. Carlos Sobera ha tenido claro lo que buscaba y se ha ido a recibir a Alba, su cita. Una mujer que se define como una chica “con temperamento fuerte, cabezona… lo voy gestionando, pero soy explosiva, bomba”.
Al ver a José ha sentido que era justo lo que había pedido “moreno, con tatuajes…”. Estaba muy nerviosa y no ha dudado en decírselo a su cita, pero él parecía estar súper tranquilo. A Alba le ha gustado que su cita fuera cantante y le diera a todo lo que acaba en “ton”, lo que se lleva ahora.
A José no le ha gustado nada que Alba trabajara de camarera en el mundo de la noche, pero se ha dejado llevar porque ella parecía muy contenta de haberle conocido y no paraba de preguntarle por su faceta de cantante. Él ha queridos saber si la joven era celosa y ella le ha dicho que sí, pero que no sentía que se fuera a enfadar porque él estuviera grabando un videoclip con otras chicas.
Sin embargo, sí le ha molestado que “el chulazo de barrio” que tanto le estaba gustando le dijera que no la dejaría trabajar de noche si fuera su novia. Ella es una chica con carácter y le ha dejado las cosas claras.
Alba ha querido saber si a José le gustaban los niños y él le ha dicho que sí. Es padre de dos niños y ella mamá de una de cuatro añitos, algo que les ha hecho coincidir. Eso sí, ella no esperaba que Cabana tuviera solo 24 añitos “yo tengo 28, me lo como con patatas”.
En mitad de la conversación y sin previo aviso, José le ha preguntado “¿Te has enterado de lo que pasó ayer en Barcelona de tres a cuatro?”. Alba se ha sorprendido y le ha dicho que no se había enterado de nada, pero lo que había pasado era “una hora”. A José le encantan los chistes tontos y ella ha sentido que era igualito que su padre.
José y Alba han encontrado en su cita lo que venían buscando y ambos han tenido claro que querían repetir su cita. Él había encontrado a la loca que buscaba y ella al chulazo de barrio que las había liado buenas y estaba reformado.
Se lo han pasado genial, han conectado y se han ido directo a seguir descubriendo sus locuras.