Andrés ‘Andy’, se define como un soltero “guarromantico” porque que seas romántica y cariñoso no significa que no puedas ser sexualmente activo. A Carlos Sobera le ha sorprendido que no se quitara el gorrito al entrar en el restaurante y Andy le ha explicado que es calvo y que necesita un tiempo para regular su temperatura. Vive en Irlanda y allí hace mucho frío.
Respecto a los chicos irlandeses, asegura que son más fríos que un tempano de hielo y que su comunicación con ellos es como el antibiótico “una vez cada ocho horas”. Él es fotógrafo, están metido mucho en la cultura LGTBI y busca alguien que también sea del rollito y que no se asuste al ver sus cuatro pelucas despeinadas y sus tacones.
Jesús, su cita, se define como un chico alegre, pero muy vergonzoso. Eso sí, cuando se sube al escenario se olvida de todo. Es una persona no binaria y le dan igual los géneros. Al verle, Andy se ha quedado prendado de su sonrisa y a él también le han gustado sus ojos y su sonrisa. La primera toma de contacto no ha sido mala.
Jesús y Andy han comenzado la cena hablando de sus profesiones y han descubierto que los dos son mitad fotógrafos, mitad actores. Jesús es actor de musical y Andy le ha contado que él está haciendo drag. A Jesús no le apasiona el mundo el drag, pero no le importaría que su cita lo hiciera porque ya tuvo una pareja drag. Andy ha respirado tranquilo y le ha contado que además de a Andy ya conocía a Andrea Magnolia.
Andy ha querido saber si Jesús había tenido pareja y él le ha contado que es bisexual y que ha ido encadenando una pareja tras otra. Él es más liberal y un apasionado de los viajes en soledad “me gusta hacer turismo sexual y comerme todo lo que puedo”. Al escucharle, Jesús ha tenido claro que era mucho más lanzado que él y le han salido los colores al hablar de sexo.
Antes de que acabara la cita, Matías ha puesto música y Andy lo ha dado todo, todo al ritmo de Rosalía. Incluso, ha llegado a sentir que Jesús lo estaba pasando mal ante su ritmo. Él soltero ha sentido que Andy era su tipo de chico físicamente, pero que había algo que le había faltado para querer conocerle más, no sabe si ha sido la chispa o la magia, pero lo suyo no ha cuajado.