Vicente ha venido a ‘First Dates’ en busca de una mujer bética que le acompañe al campo y levante junto a él la bandera verde y blanca, pero a su cita en ‘First Date’ el fútbol no le gusta nada y prefiere darlo todo en otro terreno de juego.
Vicente es bético desde chico porque un amigo de su padre le empezó a regalar bufandas desde muy pequeño y le atrajeron mucho los colores. Busca a una chica normal, pero con algo especial y a ser posible que también sea del Betis. Se considera un partidazo porque tiene muchos temas de conversación y le gusta aprender. Se dedica a escribir poemas que publica en Instagram y le gustaría encontrar a alguien que le haga palpitar el corazón y que le haga interesarse por lo que le está diciendo.
Carlos Sobera le ha dicho que se fuera preparando alguno de sus poemas para sorprender a Laura, su cita, pero él el ha dicho que es “un poeta distinto” y que no memoriza sus textos “los escribo, los publico en Instagram y me olvido”.
Laura se ha presentado como una mujer a la que le gustan “los macarrillas empotradores, para que me empotren bien”. Le gustan los chicos con barba y tatuajes, y cuando ha visto a Vicente ha sentido que tenía más pinta de catequista que de macarrilla. También ha echado de menos que no tuviera más acento de Cádiz porque a ella es algo que le gusta mucho.
El soltero ha seguido el consejo de Carlos Sobera y ha comenzado la cena leyéndole a Laura uno de sus poemas. Ella le ha dicho que le había gustado, pero en realidad ha sentido que era muy facilón. Él le ha dicho que de vez en cuando le visitan las musas y ella le ha confesado que tiene una vena artística y que le gusta mucho dibujar.
Ella ha querido saber si su cita era un poco friki y Vicente le ha contado que le gustaba Juego de Tronos, El Señor de los Anillos y Star Wars, pero que el anime, por ejemplo, no le gustaba, todo lo contrario que a ella.
Vicente ha querido saber qué hacía Laura con sus amigos un día normal y ella le ha dicho que solían subirse a un monte de Jumilla a ver las vistas y estar allí juntos. A ella le gustaría probar el senderismo, pero no ha encontrado con quién. Vicente hace poco que lo probó, pero no le ha ofrecido hacerlo juntos porque fue algo que no le volvió loco. El soltero ha querido saber si a su cita le gustaba el fútbol y se ha quedado un poco chafado al saber que Laura no solo no era del Betis, sino que el último partido fue el de la final del Mundial de Sudáfrica “Cuando Iniesta metió el gol”.
El soltero está buscando a una chica que le acompañe al campo y que mueva junto a él la bandera y se ha venido un poco abajo. Sin embargo, Laura se ha interesado por cómo sonaba el himno del Betis y ha conseguido de Vicente se lo cantara durante la cena.
Laura y Vicente no habían encontrado lo que estaban buscado y se ha cerrado a descubrir las cosas que sí les podían unir con su cita. Durante el Rasca del Amor, Laura le ha contado que su abuela le pilló practicando sexo y que era una persona muy activa en el terreno sexual. Él se ha mostrado más “neutro” y ha asegurado que le excitaban los besos en el cuello mientras que ella buscaba un buen empotrador.
En el momento de la decisión final, Vicente le ha dicho que no había sentido conexión durante la cita y que para él era muy importante que su cita fuera del Betis por lo que no quería repetir la cita. Laura le ha dado la razón y se ha encontrado con un “te sorprenderías” cuando le ha dicho que le veía muy paradito en el terreno sexual.