Luca ha venido a ‘First Dates’ en busca de un chico que le siguiera el ritmo y se ha encontrado con un cordobés dispuesto a no dejarle parar, pero cuando han comenzado a hablar de sus tatuajes se han dado cuenta de que no hablar el mismo idioma quizás podía ser un problema.
Luca hace cuatro meses que dejó todo en Italia y se vino a España a vivir, algo que cree que dice mucho de su carácter. Según le ha contado a Carlos Sobera, nunca se ha enamorado y siente que se aburre muy rápidamente de todo, necesita movimiento.
Miguel Ángel, su cita, asegura que no le ha ido bien en el amor porque sus parejas no eran del todo compatibles con él. Al verle, Luca ha sentido que no era su prototipo de chico, pero que era un chico guapo, y él ha respirado tranquilo al saber que Luca trabajaba porque a él le gustan los chicos sobre todo que trabajen.
Luca le ha contado a Miguel Ángel que un día se despertó y pensó que quería cambiar su vida, lo dejó todo y se vino a vivir a Málaga. A su cita le ha sorprendido que fuera tan valiente, pero también ha tenido la sensación de que, si no tienes cargas a tus espaldas, todo es más fácil. Luca ha querido saber qué signo era su cita y al saber que era Tauro, le ha dicho que él no quería a un Tauro, pero Miguel Ángel no le ha dado ninguna importancia porque él no hace mucho caso a eso del horóscopo “cada uno es como es”.
Miguel Ángel ha querido saber cómo había pedido Luca que fuera su cita y él le ha explicado que es un tipo que se mueve mucho y que necesita a alguien que le siga el ritmo. Le ha gustado saber que Miguel Ángel también hacía crossfit y que no soportaba quedarse en casa quieto. Eso sí, Luca tiene claro que tiene que ser él el que haga los planes porque le gusta que las cosas se hagan a su manera “mientras las haga bien”, le ha respondido su cita.
Respecto a los tatuajes, los dos han descubierto que ambos tenían más de medio cuerpo decorado con tinta, pero Luca se ha quedado flasheado al saber que Miguel Ángel llevaba una catrina mexicana en el muslo “la muerte, eso es mala suerte”. El soltero se ha quedado perplejo porque para él una catrina era solo una mujer mexicana con máscara y ha sentido que el idioma les estaba creando algún que otro malentendido.
En el fotomatón, los dos se han mostrado muy dispuesto a pasarlo bien y les han dado un buen susto a las gemelas al explotar su globo. Luca está convencido de que entre ellos hay algunas cosas que no encajan, pero le ha dado un sí a Miguel Ángel, quién cree que el idioma ha hecho que entre ellos la cosa no terminara de fluir, pero que también quiere repetir.