Carlos, un culturista que se pasa a la fiesta por amor en ‘First Dates’: “La verdad es que también me gusta”

La cita de Karina y Carlos ha comenzado con un hándicap muy difícil de superar, pero no hay nada que la ilusión y Cupido no puedan superar, y Carlos ha terminado cambiando su estricta rutina de entrenos por una noche de fiesta con su cita en ‘First Dates’.

Karina tiene claro que no quiere ser madre ni ahora ni en el futuro y busca a un chico que se cuide, que le guste viajar y que salga de fiesta. Ella lleva dos años soltera “que no sola” y sabe que no es fácil encontrar a un chico que le siga el ritmo.

Carlos Sobera le ha presentado a Carlos, un hombre tan disciplinado en la vida como en el gimnasio, que se toma todo con mucha medida y que no, no le gusta salir de fiesta. La cita no ha comenzado bien, pero ellos no se han desagradado y rápidamente han comenzado a contarse de dónde eran y no han descartado ir a entrenar juntos.

Karina ha sentido que Carlos estaba muy nervioso y ha querido ir descubriéndole poquito a poco. Él le ha contado que vive en Castro Urdiales, que trabaja en una fábrica de coches, que nunca ha estado casado y que no tiene ni quiere tener hijos. Algo que a Karina le ha encantado escuchar. Ella es experta en criptomonedas, va al gimnasio y le encanta bailar.

Carlos le ha contado a Karina que el mundo del culturismo es un mundo muy estricto y que uno de los motivos por los que no le gusta ya salir de fiesta y por eso. Ella está en un momento de fiesta total, sale casi todos los días de la semana y ha sentido que eso podía ser un impedimento entre ellos. El soltero le ha confesado que hasta los 32 era fiestero, pero su vida cambió de golpe por los entrenos. Eso sí, cuando no tiene que entrenar le gusta visitar pueblos o antes también iba concentraciones de coches tuneados. Karina es más de motos y ha sentido que la edad que les separaba comenzaba a separarles.

Los solteros se han gustado y han intentado por todos los medios superar las cosas que les separaban durante su cita. Carlos ha querido saber cómo podían compaginar las salidas nocturnas de su cita y ella le ha dicho que mínimo tenía que salir tres noches de fiesta a la semana y que no pasaba nada porque no le acompañara. Él se lo ha pensado y le ha contado que convivir con él y con sus reglas estrictas de entrenos y nutrición tampoco es fácil, pero Karina ha sido pareja de un piloto profesional y sabe lo que es eso.

Los dos nos han tenido en ascuas hasta el momento de la decisión final, en el que al saber que Karina quería volver a verle, Carlos le ha reconocido que a él también le gusta mucho salir de fiesta y que en su próxima cita le iba a enseñar los mejores sitios para salir de Castro Urdiales, sin importarle saltarse sus propias normas.