Patricia se ha definido como una persona complicada de enamorar, pero le ha gustado tanto su cita que no se ha dado de que ella no le estaba gustando nada a él y que estaba buscando cualquier excusa para salir corriendo.

Patricia es una mujer con una personalidad muy fuerte y mucho carácter, pero también una persona risueña. En el amor ha tenido cuatro relaciones y busca a una persona como ella, que sea libre, no tenga celos, independiente, que confíe en su pareja… No tiene ninguna afición concreta y en este momento todo su tiempo libre se dedica a su hija.

Javier, su cita, es una de esas personas que se define como una persona normal “amable, cariñoso, con valores…”. Lleva desde los 18 años practicando deporte y profesionalmente ha trabajado en Londres y Nueva York. Al verle, una gran sonrisa de ha dibujado en la cara de Patricia porque ha sentido que se parecían mucho.

Patricia y Javi se han llevado una sorpresa al saber que los dos se dedicaban al mundo inmobiliario, pero a él no le ha gustado mucho que ella le dijera que no tenía aficiones porque entre el trabajo y su hija pequeña no tenía tiempo para nada. Él tiene tres hijos, pero los tiene en Estados Unidos y ha sentido que igual ella no iba a tener tiempo para dedicarle si comenzaban a conocerse y eso le ha echado para atrás.

Patricia le ha explicado a Javi que es una persona un poco especial en el amor y que no le gusta que agobien ni le digan palabras cariñosas, se agobia con mucha facilidad. Él lo ha visto como un punto más que les separaba porque es un tipo muy cariñoso y de hecho, en el momento que ella ha bromeado con un “Que me traigan otro que este no me gusta”, ha intentado tomárselo al pie de la letra.

Javi ha querido saber qué buscaba Patricia de una relación y ella le ha contado que ella nunca se enfada, pero que necesita a una persona con la que poder hablar de todo si en algún momento tiene un conflicto. Ella ha sentido que Javi era un tipo así y él se ha alegrado “por lo menos te gusta algo de mí”.

El entrenador personal le ha preguntado por el significado de los tres puntos que llevaba tatuados debajo del ojo y ella le ha dicho que ninguno. A él le ha sorprendido que se tatuara la cara y ella le ha contado que también llevaba una huella de perro en rosa en la otra mejilla y que estaba deseando tatuarse la cabeza. Algo que a Javi le ha dado “mucha pereza”.

En el momento de la decisión final, patricia ha dicho que sí quería repetir y se ha quedado muy sorprendida al escuchar a Javi decirle que no quería seguir conociéndola porque no iba a tener tiempo.