Clemente, un soltero de ‘First Dates’ originario de la Isla del Dragón y con la edad de la Bestia
Clemente se define como “un ratón de biblioteca que no quiere parar de aprender”
Clemente, a Rosa: “Aunque me veas paradito soy muy pasional”
Clemente conoce el mundo entero en el mapa y quiere descubrirlo del brazo de Rosa
Clemente se ha presentado en ‘First Dates’ como un hombre que no se cansa de aprender y que no quiere que nadie deje de utilizar la cabeza. Hace pajarito con las manos para estimular su cerebro y hace que lo hagas los demás con sus respuestas. Algo que a Rosa, su cita, le ha gustado, pero hasta cierto punto “Se más directo, ya pienso yo cuando yo quiera”.
Clemente se define como “un ratón de biblioteca porque siempre estoy estudiando, aprendiendo”. Le gusta el teatro, las exposiciones, los documentales… y es un hombre “de buen conformar”. Según le ha contado a Carlos Sobera no esperaba nada de su cita, quería a una mujer con la que entenderse porque tiene claro que si una mujer es guapa o fea depende de cómo se sienta ella.
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Un criterio por el cual, Rosa es una mujer bellísima porque se define como una mujer con amor propio que lucha y se valora. Al ver a Carlos Sobera en persona se ha llevado una alegría y ha conocido a Clemente, con una gran sonrisa “tiene nombre de flor y una gran sonrisa, ¿qué más se puede pedir?”, ha asegurado Matías al ver a los solteros juntos por primera vez.
Clemente ha comenzado la cita sorprendiéndola con un detalle y a Rosa le ha encantado. Hace pájaros para mover las manos porque así activa su cerebro. Al escuchar a Rosa ha sabido que es andaluza y él le ha dicho que era “de la Isla del Dragón”. Rosa se ha quedado igual y ha querido que le aclarase cuál era ese lugar. Clemente le ha contado que vive en Madrid, pero es natural de Mallorca “si miras el mapa, tiene forma de cabeza de caballo o dragón”.
A Rosa le ha chirriado un poco que Clemente le retirara la silla o le llevara la bebida porque son “detalles arcaicos”, pero que a ella le dicen mucho de una persona y le gustan. Al saber que Rosa era de un pueblo de Sevilla, Clemente le ha contado que estaba estudiando esa zona por su comercio con las Indias en el s. XVII y ella se ha sorprendido mucho. El soltero le ha contado que había sido contable toda la vida, pero que le apasionaba estudiar.
Ella es médico y le ha llevado a que comenzaran a hablar de prebiótica y otros términos que han hecho que Rosa le sintiera un poco pedante, pero no algo que no se pudiera cambiar con un comentario.
Rosa ha querido saber qué edad tenia Clemente y él le ha respondido con un “tengo la edad de la bestia”. Ella ha adivinado que eran 66, pero le ha pedido que fuera más director porque ella pensaba por si sola y no solo cuándo él le ponía a prueba. A Clemente le ha gustado que fuera una mujer de carácter y le ha dado la enhorabuena por tener 4 hijos.
Clemente conoce casi todo el mundo en el mapa, pero no ha tenido la oportunidad de viajar mucho por motivos laborales. Se ha jubilado de uno de sus empleos, pero en el otro quiere seguir trabajando hasta que el cuerpo aguante.
Al saber que a Rosa le gusta que le coman la oreja, Clemente ha tenido claro que él le comería la oreja y muchas más cosas. Le ha advertido que era un hombre muy pasional aunque pareciera muy tranquilito.
Los dos tenían claro que se habían gustado y que querían seguir descubriéndose y recorriendo el mundo juntos, pero a ella le ha preocupado que Clemente siguiera trabajando tanto y él le ha dicho que no se preocupara que él trabajaría cuando estuviera dormida.