Óscar venía buscando una mujer con cierto interés intelectual y se ha encontrado con Seidy, una azafata de vuelo que también medita, es fan de Harry Potter y está deseando que el enseñe todo lo que sabe hacer con el piercing que tiene en la lengua.
Óscar es un superdotado certificado “Tengo un 155 en la Escala de Cattell” y es tripulante de cabina de pasajeros. Asegura que ser superdotado no te facilita la vida porque tienes ventaja en algunos terrenos y lo tienes más complicado en otros como es en el tema social. Entre sus aficiones está la meditación y busca a una mujer con cierto interés intelectual “que se interese por las cosas”.
Seidy, su cita, se define como una mujer curiosa y como buena azafata “con ganas de volar”. Al verla, Óscar se ha llevado una buena impresión “viene muy arreglada y ha sonreído, que es lo importante” y rápidamente se han puesto a hablar de su profesión en común.
Ya sentados en la mesa, el primer tema de conversación que ha surgido entre Óscar y Seidy ha sido la meditación. Ambos la practican, ella desde un terreno más religioso y él más terrenal, pero comparten un interés que no es fácil de encontrar. Ella también le ha confesado que le apasiona leer y que Harry Potter está entre sus lecturas preferidas. Otra coincidencia más porque Óscar también lo ha leído y el último Halloween se disfrazó del mago “Solo me tuve que cambiar las gafas, tengo hasta la cicatriz”.
Seidy busca a un tipo con interés intelectual y se ha llevado una grata sorpresa al saber que su cita tenía altas capacidades. Ella necesita sentir admiración por su cita y ha sentido que Óscar le podría enseñar muchas cosas.
Respecto al tema sexual, Seidy le ha dicho que ella no tenía ningún tipo de tabúes sexuales porque consideraba el sexo como algo completamente bello y natural. Al saber que a Óscar le excitaba la seducción y la provocación, no ha dudado en agarrarle las manos para sentir su energía, pero lo que realmente le ha excitado de él, ha sido imaginarse lo que la podría hacer sentir con el pendiente que tenía en la lengua.
Es más, durante la decisión final, le ha puesto contra las cuerdas preguntándole en qué parte y cómo utilizaría su pendiente con ella. Óscar ha intentado ser prudente y le ha dicho que lo utilizaría en las zonas más sensibles, pero no ha llegado a decir lo que ella estaba esperando. Sin embargo, Seidy se ha quedado con ganas de más y no ha dudado en decir que quería tener más citas con el hombre de las altas capacidades.