Roberto y Susana han tenido una cita de lo más divertida. Los comensales de ‘First dates’ han conectado desde el primer momento y se han entendido a la perfección gracias al humor, ya que reír es algo que a los dos les encanta.
El está separado, con cinco hijos y está cansado de que lo tachen de infiel. Tiene fama de ello y considera que no lo es. Por su parte, Susana es una mujer muy risueña, se considera tradicional, a la que le gustan las cosas “bien hechas”.
Se han dado cita en la terraza del Beach Club y han podido disfrutar de un refrescante baño en el jacuzzi. Allí, al ver a su cita quitarse la ropa, la de Torremolinos se ha quedado completamente impactada.
“Vaya cuerpo. Me daba fatiga y todo mirar. Qué chorbo. Qué cuerpazo, qué morenazo… ¡Me vuelvo loca!”, decía la comensal de ‘First dates’ al ver al malagueño sin ropa. Se ha quedado muy impactada y ha dejado claro que estaba muy interesada en él.
Ambos se han gustado bastante y han conectado desde el primer momento. Por ello, no han dudado en marcharse juntos en la decisión final del programa de Carlos Sobera. Ella ha asegurado que quería una segunda cita con él porque le veía “humilde” y “sencillo”.
Por su parte, él ha afirmado que quiere seguir conociéndola porque es una chica “muy graciosa, muy positiva y muy sencilla”: “No actúa, le sale todo espontáneo”.