Ni saunas ni cruising ni cuartos oscuros… A Gerardo lo que le gusta son “los intercambios de pareja”
Propone a su cita en ‘First Dates’ tener una segunda cita en un lugar de intercambio de pareja de Granada
Gerardo, ante la timidez de Ángel en el reservado: “Los chicos formalitos tienen su punto”
Gerardo y las relaciones abiertas: “A los 4 o 5 años o abres la relación o se termina”
Ángel y Gerardo se han sorprendido al verse y no conocerse al ser los dos de Granada. Ángel le ha contado que él no va a sitios de ambiente ni utiliza apps de ligoteo y a Gerardo le ha llamado la atención descubrir qué tenía que ofrecerle el chico tan formal que acababa de conocer. Se han gustado y la cosa ha funcionado bien hasta que han tratado el tema de las relaciones. No parece que busquen lo mismo.
Gerardo y Ángel han comenzado su cena hablando del momento en el que salieron del armario, pero los dos han tenido claro que no necesitaron hacerlos porque desde pequeñitos sus familias se dieron cuenta rápido. Gerardo le ha contado a Ángel que lo único que no le gusta del mundo del ambientes son “los cuartos oscuros” y él ha estado de acuerdo “ni las saunas tampoco”. A ninguno de los dos parece que les gusta demasiado el mundo de cruising ni eso de tener sexo con un desconocido entre los matorrales.
“Mala elección los espaguetis”, ha soltado Ángel al ver que su cita lo estaba pasando mal para comérselos sin hacer ruido ni mancharse en una primera cita. Gerardo ha bromeado con “pensaba que me iba a echar un polvo y me echó los espaguetis”.
Gerardo ha querido saber qué buscaba Ángel en el amor y al escuchar la palabra estabilidad le ha planteado la posibilidad de una relación abierta. Él tiene claro que durante los 4 o 5 primeros años las relaciones son cerradas pero que después, o las abres o las relaciones se mueren. Ángel le ha dejado claro que esas cosas a él no le gustan y que no sería capaza de estar con su pareja sabiendo de dónde vendría. Pero Gerardo le ha aclarado que su concepto de relación abierta va más por los intercambios de pareja e introducir algún juguetito “humano” en la relación.
Incluso, le ha planteado que su segunda cita fuera en un conocido local de intercambio de pareja que hay en Granada, pero Ángel ha tenido claro que eso no era para él.
En el reservado, Gerardo se ha mostrado muy lanzado y con ganas de jugar a todos los juegos sexuales de ‘First Dates’, pero Ángel ha pisado el freno y se ha mostrado muy cortado. A Gerardo no le ha importado porque “los chicos formalitos tienen su punto”, pero Ángel no quería ir más allá porque sabía que no estaban buscando lo mismo y estaba a punto de darle calabazas.
Se han caído muy bien, se lo ha pasado genial juntos y Gerardo repetiría, pero Ángel busca algo serio y lo del tema de las relaciones abiertas y los intercambios de pareja no van con él.