Julius, ante las dudas de su cita en ‘First Dates’ sobre su tono de piel: “Las cosas se llaman por su nombre, soy negro”

  • Carmen y María son madre e hija y buscan juntas el amor en ‘First Dates’

  • Carmen alucina ante la historia familiar y de poligamia de Julius: “¿En Camerún no existen los celos?”

  • A Julius no le gusta que le digan que es de color: “Si me llaman negro no es un insulto, soy negro”

Carmen ha venido a ‘First Dates’ del brazo de su madre María, su compañera de risas, su amiga y la persona con la que lo comparte todo. Ninguna de las dos ha tenido mucha suerte en el amor y han decidido intentar que eso cambie.

María se ha tirado a los brazos de Carlos Sobera nada más verle, estaba deseando conocerle en persona y no ha dudado en regalarle un montón de piropos y es que si tuviera que decir qué tipo de hombre le gusta, sería uno que fuera tipo el presentador o Kevin Costner. Lleva 10 años sola y hace 38 años que su marido la dejó, estaba viendo con dos mujeres al mismo tiempo. Su único requisito para enamorarse es que sea un hombre limpio, muy limpio “que no le huela la boca ni lo de ahí abajo, que le puedas besar por todo el cuerpo y esté limpio”. Eso sí, asegura que no le va bien porque le suelen gustar los chuletas “mi marido lo era y así me fue”.

Su hija Carmen, lleva 3 años divorciada y tiene una niña de 14 años. Busca a un chico que sobre todo, tenga sentido del humor porque ya tenemos bastante con los problemas del día a día.

Julius, su cita, vino a España con la ilusión de encontrar una nueva vida y no lo tuvo nada fácil “vine caminando, saltando vayas y aquí estoy”. Vive en Murcia y al ver a Carmen ha sentido algo especial “¡Wow! Es la persona que yo esperaba”. Rápidamente se han puesto a hablar y él le ha contado que es escritor, pero que también trabaja en el campo y que tiene dos hijos, de diferentes mujeres.

Carmen tenía la estatura y las curvas perfectas para él, y con eso es suficiente, le da igual que las mujeres sean más o menos guapas. Sentados en la mesa, Carmen se ha interesado por el libro de Julius y él le ha contado que estaba funcionando bastante bien y se titulaba “Mi vida primitiva en poligamia”. Su padre tiene 8 mujeres, son 18 hermanos y todas las mujeres sienten que su padre es un gran hombre.

La soltera ha flipado y ha confiado en que esas cosas hoy en día no pasaban, pero él le ha contado que sí. Carmen no podría compartir a su hombre y ha querido saber si en Camerún no existían los celos.

Carmen le ha contado que ella siente mucha curiosidad por la gente de color y que había pedido a “un morenito oscuro” para su cita. La soltera no sabía muy bien cómo referirse a la gente de color y Julius le ha dejado claro que “Las cosas se llaman por su nombre”, él es negro y no le importa que le llamen negro porque lo es y no es un insulto.

Su cita ha sido amena y él estaba encantado con la belleza de Carmen, pero ella ha echado en falta la gracia que esperaba encontrar. Tenía la esperanza de estar toda la cita riéndose y a Julius le ha faltado esa chispa.