Noelia ha venido a ‘First Dates’ en busca de un chico rarito que fuera buena persona y se ha encontrado con Borja, un joven raro que no soporta a la gente dramática, pero que ha encontrado un puntito muy interesante en la “sad girl” con la que ha cenado.
Noelia ha tenido una experiencia traumática en el amor de la que prefiere no hablar. Es bisexual y le suelen gustar “los raritos” los que al verlo piensas “es divertido, pero algo le pasa”. Es consciente de que elige muy mal y se considera “masoca”.
Borja, su cita, cree “que la gente es lo peor, hay mucha gente mala y muy poca gente buena en el mundo”. Al saber que a Noelia le gustan raritos ha soltado un “habéis dado en el clavo”, pero ella no le ha visto especialmente rarito, “le he visto normalito”.
La cita de Noelia y Borja ha comenzado con un “¿Estudias o trabajas?” y ella le ha contado que su sueño sería ser funcionaria de prisión y se está preparando en el ámbito psicológico. Sin embargo, cuando Borja le ha preguntado que si era de las personas que luchan por su sueño, nos ha soltado una reflexión sobre la cultura del esfuerzo, que te premia para ser productivo y lo único que consigue es premiar a los ricos y que la clase media se aparte de su vida y se centre en trabajar.
Noelia le ha contado a Borja que en el amor ha tenido muy mala suerte y que no tienen relación con ninguno de sus ex. Algo que no le preocupa porque ella puede estar sola perfectamente de hecho, en su lista de niveles está “comer, dormir, socializar y luego ya, follar”. Borja le ha contado que él no soporta a la gente dramática que está triste y se pone música triste para estarlo más y Noelia le ha soltado un “esa soy yo, quiero que me destruya”.
A Borja y a Noelia les atrae lo raro y han querido saber lo más raro que tenía su cita. El soltero le ha dicho que todo el mundo el confunde con un cura y aunque es ateo, no descartaría dedicarse al sacerdocio por la tranquilidad de su vida y lo respetados que son en los pueblos pequeño. Ella le ha contado que entre sus rarezas está que solo tiene media campanilla por un descuido del dentista.
Noelia ha querido saber la opinión de Borja sobre la cantidad de puertas o de ruedas en el mundo y él ha coincidido con ella en que en el mundo hay mucha más ruedas que puertas y cosas “la gente pone ruedas a cualquier cosa”. Además, le ha preguntado quien pensaba que ganaría en una lucha “¿Un oso o un hipopótamo?”. Borja ha tenido claro que en una lucha, siempre ganaría un oso.
En el momento de la decisión final, Borja ha asegurado que sí le gustaría seguir conociendo a su cita “creo que me empiezan a gustar la chicas tristes”, pero ella le ha confesado que solo volvería a quedar con él como amiga.