Felicidad tenía claro que el sexo tenía que ser algo más de lo que ella había vivido en su matrimonio y en el momento que se divorció, decidió formarse en el asunto “Compré libros porque nunca había tenido un orgasmo”.
Felicidad asegura que cuando estaba casada jamás sintió un orgasmo y que alucinó cuando conoció a un chico de 38 años “Toda la noche, un orgasmo detrás de otro, yo no sabía que era multiorgásmica, muchacho”.
A Felicidad le encanta el tema sexual y no ha dudado en compartir con Paz parte de su sabiduría. Está convencida de que lo mejor para la depresión es hacer el amor y ella está dispuesta en todas las ocasiones y en cualquier postura “haciendo el pino, colgada del techo”. Eso sí, “lo importante es que no pinche porque si luego haces el amor te lo deja todo en carne viva”.
Nos ha contado que su último juguete sexual es un cinturón vibratorio “es japonés y es una maravilla”, pero que está deseando volverse a enamorar y practicar sexo con amor.