La conexión entre Juan Luis y Sofía no acababa de consolidare. Pese a tener muchos puntos ya ganados como ser de la misma ciudad y creer haberse visto en alguna ocasión, la conversación no acababa de fluir entre ellos.
A Juan Luis le faltaba que Sofía se implicara más: “Yo he intentado llegar a ella en las conversaciones y no me miraba a los ojos, y a mí eso no me gusta”. Ella, sin saber lo que le estaba pasando por la cabeza a su cita, reconoció lo que se sentía Juan Luis: “La verdad es que no lo he mirado muchísimo a los ojos, mirarlo me daba corte”.
Pese a todo, él no quería darse por vencido y lo intentó todo por conectar. “Es necesario también que una cita entre por los ojos, que haya esa llamada a querer darle un beso”, comenzó diciéndole a Sofía, que no pudo evitar sorprenderse ante la petición de Juan Luis:
“Me he dado cuenta de que cuando nos hemos visto no nos hemos hecho el 'checking'. Venga, ponte de pie que tengo que hacerte el cheking”. Ella se quedó perpleja, pero entró el juego sin problema; el, por supuesto, también la deleitó con “el paseíllo”.