Inés y Víctor son de Palencia. Sin embargo, cada uno tiene una concepción muy diferente de su ciudad. Para él Palencia es maravillosa y no ha dejado de hablar de sus productos durante toda la cita: "Vamos a brindar por la buena tierra y los buenos vinos. El buen marisco está en el norte, el vino también´, la carne también. me gusta dar de comer a quien me puede dar de comer, me he vuelto más comarcal", explica.
"Yo soy ciudadana del mundo, nacionalismos cero. Me esperaba a alguien un poco más intenso, más divertido, para mi gusto es un poco aburrido. Él es como muy productos de Palencia, que me parece muy respetable, pero todo ese rollo no va conmigo", confesaba ella.
"A mí Palencia no me gusta, me parece que la gente es un poco cerrada de mente y yo soy muy abierta", le ha confesado Inés a su cita. A Inés, este cambio de visión le ha parecido un obstáculo para seguir conociéndose y han decidido no tener una segunda cita.