Soberbia intervención de Pollersbeck. El joven guardameta alemán, uno de los mejores del torneo y uno de los jugadores más destacados de su selección, volvió a salvar el primero de Alemania. Esta vez fue a un remate de Abrahams, que remató completamente sólo y libre de marca. El germano sacó una providencial mano sobre la propia línea de gol. Una de las mejores paradas del Europeo, sin ninguna duda.