España llegó al día clave en progresión. De menos a más a lo largo del campeonato. En cuartos de final había un hueso duro. Muy duro. Y había que hacer un partido casi perfecto para poder estar en la lucha por las medallas. La defensa de los griegos había brillado durante todo el torneo, dejando a sus rivales en 65 puntos de media, pero la ÑBA tenía 88 puntos por partido hasta el duelo de cuartos.

Pau Gasol, Rudy Fernández y Pau Ribas, los 'tocados' de la Selección jugaron. No era día para reservarse, ni para descansar. Era el día de darlo todo sobre la pista. Y la ÑBA lo sabía. Las dos primeras posesiones no pudieron ser mejor, dos triples de Sergio Llull y un robo de Rudy Fernández. La ÑBA iba a necesitar el juego exterior para plantar cara a los griegos. Y si encima Pau Gasol mantenía su nivel y se entendía con Mirotic, las opciones iban a ser mayores.

La defensa de España estaba a un muy buen nivel y Spanoulis se jugó los ataques cuando la ÑBA se ponía a seis. Al final del primer cuarto, el encuentro estaba igualadísimo (14-14), pocos puntos, de momento ganaban las defensas. Anotar costaba un mundo y España vivía del buen acierto desde la línea de tres y los tiros libres, Grecia llegó al 'bonus' a falta de cinco minutos para el descanso.

Scariolo cambió la defensa a una presión en todo el campo y una zona agresiva que sorprendió a los de Katsikaris. Antetokounmpo y Printezis sostenían a Grecia y se imponían en los tableros, el rebote defensivo estaba siendo el lastre de la ÑBA. Aún así, a menos de cuatro minutos para el final del segundo periodo, España estaba seis arriba en el marcador (29-23).

Pau Gasol y Nikola Mirotic se echaron el equipo a la espalda antes del descanso y la ÑBA pegó un estirón. Siete puntos arriba (39-32) al descanso pero con sólo cuatro jugadores que habían anotado: la pareja de los Bulls, Sergio Rodríguez y Sergio Llull. El gran problema fue el rebote, Grecia casi doblaba a la ÑBA, 21 a 12. Siete puntos con Grecia no es seguro de nada y en la segunda parte no se podía bajar la intensidad ni un instante.

Spanoulis vio que las cosas se podían poner feas y arrancó con un triple cayéndose de lado. Grecia estaba más agresiva, con Spanoulis y Antetokounmpo a los mandos y un triple de Calathes tiró por la borda la diferencia en un abrir y cerrar de ojos (42-42). Partido empatado y volver a empezar. Scariolo llamó a sus jugadores a filas y cortó la racha con un necesario tiempo muerto.

El parcial crecía 14-3 hasta que apareció el de siempre. Pau Gasol cortó la hemorragia con un triple y despertó, a medias, a España. El pívot de los Bulls mantuvo a España con vida, de los 16 puntos que anotó la ÑBA en el tercer periodo (55-57), salvo tres de Pau Ribas y dos tiros libres de Pau Ribas fueron todos suyos.

Los griegos se cargaron con cuatro faltas en el primer minuto del último cuarto. Víctor Claver surgió con tres rebotes muy importantes, que con una canasta de Felipe Reyes y un mate a dos manos espectacular de Nikola Mirotic lanzó a España 60-57. La dinámica había cambiado y la ÑBA seguía metida de lleno en el partido, con un defensa con mucha intensidad. Si en los tres cuartos anteriores la presencia del resto de los jugadores había sido testimonial, en el momento de la verdad respondieron Víctor Claver, Felipe Reyes y Sergio Rodríguez. El partido estaba apretado a falta de cinco minutos (64-60) y los dos equipos con bonus. Los tiros libres iban a ser muy importantes en el tramo final.

Mirotic anotaba los dos en un lado de la pista y Spanoulis sólo uno. La ventaja era de cinco puntos a falta de tres minutos (66-61). Sergio Llull falló un triple pero Mirotic sacó una falta en el rebote que volvió a subir dos puntos en el marcador. Spanoulis no metió un triple y el partido llegó a unos segundos locos. Gasol perdió la bola y Antetokounmpo hizo pasos de salida cuando iba a anotar. España mantuvo los siete puntos de diferencia hasta el final y se ganó el billete a semifinales a pulso. La ÑBA jugará este jueves con Francia por estar en la gran final del Eurobasket.