Serbia tenía que cumplir el expediente ante Islandia. La selección de Djordjevic, uno de los equipos más fuertes hasta el momento en el campeonato, ya había dado cuenta de España y de Alemania, y el partido en la cuarta jornada se presentaba más sencillo. Sin descanso de inicio para los teóricos titulares: Teodosic, Bjelica, Kalinic, Markovic y Kuzmic.
Los serbios arrancaron con ritmo, para sentenciar cuanto antes y dar descanso para los próximos días. A los cinco minutos de encuentro, la diferencia era de siete puntos pero Islandia aumentó la intensidad defensiva y Serbia tuvo más problemas para anotar.
Pero el juego de Serbia era superior al de Islandia y con el paso de los minutos y el pésimo porcentaje de los islandeses en los triples al descanso (3/17 en tiros de tres), permitió a los de Djordjevic abrir una brecha al descanso (42-32).
Islandia se resistió al inicio del tercer cuarto pero la diferencia no se reducía. Serbia se apoyó en Kuzmic y sacando faltas mantuvo la distancia. Hasta que un triple de Bogdanovic y una canasta de Raduljica lanzó a Serbia hasta los 19.
A partir de ese momento, el partido fue un trámite y una oportunidad para pedir paso en la rotación de Djordjevic. La segunda unidad de los serbios cogió más minutos y los Teodosic, Bjelica o Kalinic pudieron sentarse para guardarse en minutos. Serbia ya tiene tres victorias y está en octavos de final.