La selección española buscaba ante Francia alzarse con su cuarto oro europeo tras haber ganado este torneo por última vez en el año 2015. Un triunfo que colocaría a España como la tercera selección con más oros en Eurobasket tras la Unión Soviética y Yugoslavia. Por parte de los galos, tras caer hace trece años contra la selección hispana en semifinales, el equipo de Vicent Collet buscará ejercer su favoritismo para conseguir un oro que no repiten en este torneo desde 2013.
Scariolo salía con el quinteto clásico del torneo. Lorenzo Brown, Jaime Fernández, Xabi López-Arostegui, Jaime Pradilla y Willy Hernangómez iniciarían el partido mientras que Francia jugaría con Albicy, Fournier, Tarpey, Yabusele y Gobert.
El partido comenzaría con Rudy Gobert abriendo el marcador desde la línea de tiros libres. España contrarrestaría con un 9-3 de salida con un Willy Hernangómez haciendo sufrir a Rudy Gobert. Los 6 puntos del pívot sorprendían y mucho a la dura defensa francesa. Heurtel entraría a los dos minutos fruto del mal inicio del juego de ataque galo, pero cinco puntos seguidos de Lorenzo Brown obligaban a Collet a parar el encuentro (14-5). Francia no encontraría en el acierto de tres el ritmo que buscaba. Yabusele cortaría la racha negativa con un buen mate a contrataque pero Francia continuaba sin carburar. Jaime Fernández estaría inconmensurable en defensa con tres robos en el primer cuarto. Este dato haría que Francia terminase con cinco pérdidas el cuarto. España continuaría haciendo daño desde la zona terminando los diez primeros minutos con una ventaja de nueve puntos para los españoles (23-14).
España no daría tregua en el segundo cuarto dando una exhibición de juego magistral. Juancho aparecería como el ave fénix que España llevaba esperado todo el torneo. El menos de tres minutos el menor de los Hernángómez metería cuatro triples consecutivos para duplicar en el marcador a Francia (32-16). Este acierto unido a la gran defensa de Rudy, Alberto Díaz y Garuba estaban dejando KO a una selección francesa que miraba al banquillo sin idea de como reaccionar. Francia terminaría la primera mitad con 10 pérdidas siendo muchas de ellas por final de posesión. Garuba se emparejaría con Gobert en un planteamiento de Scariolo fantástico para secarlo. España, a diferencia de todo el torneo, fluiría desde la línea de tres con una eficacia brutal. Juancho anotaría su sexto triple del cuarto ante la incredulidad de un Berlín Arena maravillado con el equipo español. Una hazaña que le valdría una vez más ser trending topic en la forma de 'Bo Cruz', el personaje que encarna en la película Garra. Pero Juancho no es ficción, es muy real, y acabó recibiendo un mensaje de felicitación de Adam Sandler, su compañero de rodaje en el film.
Además las diferentes zonas planteadas por Scariolo no daban tregua en ataque a los galos. Sin embargo, Francia no perdería el partido en la primera mitad. Fournier pondría de nuevo en el partido a su equipo para recortar considerablemente la distancia en el marcador. Ambos equipos marcharían al vestuario con un marcador de 47-37 a favor de España. Un resultado que dejaba un sabor agridulce para los españoles teniendo en cuenta la gran primera mitad realizada. Los Hernangómez sumarían 28 puntos en al descanso mientras que Fournier con 11 puntos sería lo único positivo de los galos.
La segunda mitad iniciaría con los mismos quintetos de inicio a excepción de Heurtel por Albicy. Yabusele bajaría de la barrera de los diez puntos con un buen 2+1 para iniciar el encuentro. España no podría cortar el gran movimiento de balón de Francia, que con un 2-9 de salida obligaba a Sergio Scariolo a parar el partido con un tiempo muerto (49-46). España reaccionaría de la mejor manera posible. De nuevo la intensidad física y el acierto colocarían a los españoles por encima de los diez puntos a los pocos minutos. Jaime Fernández colocaría un 9-0 de parcial para España que volvía a coger oxígeno. Las defensas mixtas de España no serían igual de efectivas que en la primera parte. Okobo encontraría bien las esquinas haciendo daño desde el perímetro, pero la veteranía de Rudy también sería castigada desde la línea de tres para ir al último cuarto con nueve puntos de ventaja (66-57). Francia tan solo ganaría el cuarto por un punto fruto del gran acierto desde el triple español (50% con 12 de 24).
El último cuarto comenzaría con un nivel de defensa francés acorde a una final europea. Francia se pondría a siete puntos tras el tiro libre anotado tras técnica a Scariolo. Y cuando el equipo más lo necesitaba, Juancho apareció de nuevo en escena. Cinco puntos consecutivos suyos ampliaban de nuevo la ventaja española. Garuba volvería a ser el jugador decisivo en defensa en el último cuarto. Su polivalencia para defender a exteriores e interiores y su rapidez de manos lograban frustrar a los franceses. Fournier entraría de nuevo al campo con cuatro faltas para remontar el partido pero ya sería demasiado tarde. España con un triple de Alberto Díaz colocaba el +15 a falta de minuto y medio. España se proclamaría campeona del Europa con un resultado final de 88-76.
Gloria para una España capitaneada por un Rudy Fernández que no podía evitar emocionarse en la celebración. Al igual que los Hernangómez y el resto del equipo.