Los parásitos pueden causar diversos problemas de salud en los cachorros
Desparasitar a los cachorros es indispensable puesto que los parásitos internos y externos pueden afectar gravemente su salud y desarrollo
Los parásitos pueden causar diversos problemas como anemia, retraso en el crecimiento y riesgo de transmisión a otros animales y humanos
Es importante realizar visitas regulares al veterinario para prevenir su infección
Desparasitar a los cachorros es un paso esencial en su cuidado, ya que los parásitos internos y externos pueden afectar gravemente su salud y desarrollo. En este artículo, ahondaremos en la importancia de la desparasitación, los tipos comunes de parásitos que afectan a los cachorros, y cómo reconocer los signos de infestación
¿Por qué es importante desparasitar a los cachorros?
Los parásitos pueden causar diversos problemas de salud en los cachorros, incluyendo:
Retraso en el crecimiento y desarrollo: Los parásitos intestinales pueden interferir con la absorción de nutrientes esenciales, lo que afecta el crecimiento.
Anemia: Algunos parásitos se alimentan de la sangre del cachorro, lo que puede llevar a una pérdida significativa de sangre y anemia.
Problemas digestivos: Los parásitos pueden causar vómitos, diarrea y dolor abdominal.
Debilitamiento del sistema inmunológico: Una infestación parasitaria puede debilitar el sistema inmunológico, haciéndolos más susceptibles a otras enfermedades.
Riesgo de transmisión a otros animales y humanos: Algunos parásitos pueden ser zoonóticos, lo que significa que pueden transmitirse de los animales a los humanos.
Tipos comunes de parásitos en cachorros
Los parásitos pueden ser internos y externos. En el caso de los internos, destacan:
Gusanos redondos (Nematodos): Los gusanos redondos, como Toxocara canis, son comunes en los cachorros. Pueden ser transmitidos a través de la leche materna o el ambiente.
Gusanos gancho (Ancylostoma): Estos parásitos se adhieren a la pared intestinal y se alimentan de la sangre.
Gusanos Látigo (Trichuris): Afectan principalmente el intestino grueso.
Gusanos Tenias (Cestodos): Las tenias se transmiten comúnmente a través de la ingestión de pulgas infectadas o carne cruda.
Protozoos (Giardia, Coccidios): Protozoos como Giardia y Coccidia pueden causar infecciones intestinales.
Pulgas: pequeños insectos que se alimentan de la sangre de los animales
Garrapatas: Parásitos que se adhieren a la piel y se alimentan de la sangre.
Ácaros (Sarna): Causan enfermedades de la piel como la sarna.
Cómo desparasitar a un cachorro
Llévalo al veterinario para una revisión completa. El veterinario realizará un examen físico y puede solicitar análisis de heces para identificar la presencia de parásitos internos. Además, el veterinario recomendará un antiparasitario adecuado basado en la edad, peso y salud del cachorro. Los antiparasitarios pueden ser en forma de pastillas, líquidos o tópicos. Generalmente, se recomienda desparasitar a los cachorros por primera vez entre las 2 y 4 semanas de edad. Los cachorros deben ser desparasitados cada 2-3 semanas hasta que alcancen los 8-12 semanas de edad, y luego mensualmente hasta los 6 meses de edad. Una vez que el cachorro ha alcanzado los 6 meses, se recomienda un plan de desparasitación regular que podría ser trimestral o según las indicaciones del veterinario.
En el caso de la desparasitación de parásitos externos, utiliza productos específicos recomendados por el veterinario, como collares antipulgas, pipetas tópicas o comprimidos orales. Mantén el entorno limpio y lava regularmente la ropa de cama del cachorro. Los tratamientos pueden incluir baños medicados, medicamentos tópicos o sistémicos y el control de la higiene del entorno.
Signos de Infestación por parásitos
Es fundamental estar atento a los signos que pueden indicar una infestación parasitaria en tu cachorro:
Cambios en el apetito: pérdida o aumento inusual del apetito.
Pérdida de peso: Disminución del peso a pesar de una dieta normal.
Cambios en las heces: Diarrea, heces con sangre o gusanos visibles.
Letargo: Falta de energía y disminución de la actividad.
Picazón o irritación: Rascado excesivo, especialmente en el área anal.
Vómitos: Especialmente si se observan gusanos en el vómito.
Abdomen distendido: Abdomen hinchado o redondeado, común en infestaciones severas de gusanos.