Si hay que hablar de los okupas de la pandemia, no se puede pasar por alto el caso de Pilar, la sanitaria que se tuvo que ir a otra ciudad para trabajar contra el covid en plena expansión de la pandemia y cuya casa fue okupada. Una reportera la ha acompañado hasta la casa donde su okupa, que tiene dos coches en propiedad, se ha atrincherado y no sólo no han conseguido mediar con él sino que el programa casi sale perjudicado.