Aprovechándose el vacío legal de nuestra legislación sobre el aprovechamiento de personas necesitadas, los reporteros de ‘En el punto de mira’ han descubierto un nuevo caso de alquiler a cambio de sexo. En esta ocasión, se trata de un hombre de 57 años con pareja que ofrece compartir su cama a cambio de sexo diario a una joven que asegura no tener donde ir. Al ser sorprendido, reconoce que no está bien lo que hace y asegura que se trata de una broma.